El número de página del Misal Romano ha sido actualizado conforme a su última edición en 2018. El número entre paréntesis en MR ( ) corresponde al Misal Romano edición para México de Editorial BAC.
Verde / Feria o Misa por los Religiosos
MR p. 1061 [1106] / Lecc. I p. 553
ANTÍFONA
DE ENTRADA Sal 36, 3-4
Pon tu esperanza en Dios, practica el bien y vivirás
tranquilo en esta tierra. Busca en él tu alegría y te dará el Señor
cuanto deseas.
ORACIÓN COLECTA
Señor Dios, que inspiras y llevas a término todo buen
propósito, conduce a tus hijos por el camino de la salvación eterna
y haz que quienes, dejándolo todo, se consagraron totalmente a ti
siguiendo a Cristo y renunciando a lo mundano, en espíritu de pobreza
y humildad de corazón te sirvan fielmente a ti y a sus hermanos. Por
nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina contigo en la
unidad del Espíritu Santo y es Dios por los siglos de los siglos.
PRIMERA
LECTURA
[Esperaban la ciudad de sólidos cimientos,
cuyo arquitecto y constructor es Dios.]
De
la carta a los hebreos 11, 1-2. 8-19
Hermanos: La fe es la forma de poseer, ya desde ahora,
lo que se espera, y de conocer las realidades que no se ven. Por ella,
fueron alabados nuestros mayores.
Por su fe, Abraham, obediente al llamado de Dios, y sin
saber a dónde iba, partió hacia la tierra que habría de recibir como
herencia. Por la fe, vivió como extranjero en la tierra prometida
en tiendas de campaña, como Isaac y Jacob, coherederos de la misma
promesa, después de él. Porque ellos esperaban la ciudad de sólidos
cimientos, cuyo arquitecto y constructor es Dios.
Por su fe, Sara, aun siendo estéril y a pesar de su avanzada
edad, pudo concebir un hijo, porque creyó que Dios habría de ser fiel
a la promesa; y así, de un solo hombre, ya anciano, nació una descendencia
numerosa como las estrellas del cielo e incontable como las arenas
del mar.
Todos ellos murieron firmes en la fe. No alcanzaron los
bienes prometidos, pero los vieron y los saludaron con gozo desde
lejos.
Ellos reconocieron que eran extraños y peregrinos en
la tierra. Quienes hablan así, dan a entender claramente que van en
busca de una patria; pues si hubieran añorado la patria de donde habían
salido, habrían estado a tiempo de volver a ella todavía. Pero ellos
ansiaban una patria mejor: la del cielo. Por eso Dios no se avergüenza
de ser llamado su Dios, pues les tenía preparada una ciudad.
Por su fe, Abraham, cuando Dios le puso una prueba, se
dispuso a sacrificar a Isaac, su hijo único, garantía de la promesa,
porque Dios le había dicho: De Isaac nacerá la descendencia que ha
de llevar tu nombre. Abraham pensaba, en efecto, que Dios tiene poder
hasta para resucitar a los muertos; por eso le fue devuelto Isaac,
que se convirtió así en un símbolo profético. Palabra
de Dios.
SALMO
RESPONSORIAL Lucas 1
R/. Bendito sea el Señor, Dios de Israel.
Bendito sea el Señor, Dios de Israel, porque ha visitado
y redimido a su pueblo, y ha hecho surgir en favor nuestro un poderoso
salvador en la casa de David, su siervo. Así lo había anunciado desde
antiguo, por boca de sus santos profetas. R/.
Anunció que nos salvaría de nuestros enemigos y de las
manos de todos los que nos aborrecen, para mostrar su misericordia
a nuestros padres y acordarse de su santa alianza. R/.
El Señor juró a nuestro padre Abraham que nos libraría
del poder de nuestros enemigos, para que pudiéramos servirlo sin temor,
con santidad y justicia, todos los días de nuestra vida. R/.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO Jn 3, 16
R/. Aleluya, aleluya.
Tanto amó Dios al mundo, que le entregó a su Hijo único,
para que todo el que crea en él tenga vida eterna. R/. Aleluya.
EVANGELIO
[¿Quién es éste, a quien hasta el viento
y el mar obedecen?]
Del
santo Evangelio según san Marcos 4, 35-41
Un día, al atardecer, Jesús dijo a sus discípulos: "Vamos
a la otra orilla del lago". Entonces los discípulos despidieron a
la gente y condujeron a Jesús en la misma barca en que estaba. Iban
además otras barcas.
De pronto se desató un fuerte viento y las olas se estrellaban
contra la barca y la iban llenando de agua. Jesús dormía en la popa,
reclinado sobre un cojín. Lo despertaron y le dijeron: "Maestro, ¿no
te importa que nos hundamos?" Él se despertó, reprendió al viento
y dijo al mar: "¡Cállate, enmudece!" Entonces el viento cesó y sobrevino
una gran calma. Jesús les dijo: "¿Por qué tenían tanto miedo? ¿Aún
no tienen fe?" Todos se quedaron espantados y se decían unos a otros:
"¿Quién es éste, a quien hasta el viento y el mar obedecen?" Palabra
del Señor.
REFLEXIÓN:
La tormenta sorprendentemente calmada en el lago de Genesaret
no sólo revela el poder de Jesús sobre los elementos de la naturaleza,
sino que es también una clara lección acerca de la fe exigida a sus
discípulos respecto a su misma condición divina. Cuando la vida del
cristiano -o incluso de la Iglesia entera- viene estremecida por vendavales
adversos o por sorpresivas tempestades, es bueno recordar que Jesús
nos ha prometido su presencia «hasta el fin del mundo» (Mt 28, 20),
lo cual debería bastarnos para mantener la tan necesaria serenidad.
ORACIÓN
SOBRE LAS OFRENDAS
Por estos santos dones que te presentamos, santifica,
Señor, a tus siervos que has congregado en tu nombre, a fin de que,
cumpliendo con fidelidad sus votos, te sirvan con un corazón sincero.
Por Jesucristo, nuestro Señor.
ANTÍFONA
DE LA COMUNIÓN 1
Reyes 19, 7
El ángel del Señor dijo a Elías: Levántate y come, porque
aún te queda un largo camino.
ORACIÓN
DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
A quienes tu amor has congregado y hecho
partícipes de un mismo pan, concédeles, Señor, ayudarse y animarse
mutuamente en la práctica de la caridad y de las buenas obras, para
que, con una vida santa, den en todas partes testimonio eficaz de
Jesucristo. Él, que vive y reina por los siglos de los siglos.
IV
DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO
LA
PRESENTACIÓN DEL SEÑOR
MR p. 675 [690] / Lecc. I p. 994
Los orientales llaman a esta fiesta Hipapante-El Encuentro. El Señor, niño, es presentado en el
Templo. Simeón y Ana, movidos por el Espíritu Santo, dan testimonio
de lo que es Cristo. Simeón dice que será Luz de los pueblos; por
eso las candelas. Hoy se clausuran las solemnidades de la Manifestación
o Epifanía del Señor.
El Camino de la Obediencia
y la Fe (Homilía del 02 de febrero de 2006)
Un anuncio «luminoso» de redención... La fiesta de la Presentación
del Señor en el templo -cuarenta días después de su nacimiento pone
ante nuestros ojos un momento particular de la vida de la Sagrada
Familia... Según la ley mosaica, María y José llevan al niño Jesús al
templo de Jerusalén para ofrecerlo al Señor (Cfr.
Lc 2, 22). Simeón y Ana, inspirados por Dios, reconocen en
aquel Niño al Mesías tan esperado y profetizan sobre Él. Estamos ante
un misterio, sencillo y a la vez solemne, en el que la santa Iglesia
celebra a Cristo, el Consagrado del Padre, Primogénito de la nueva
humanidad... El oráculo del profeta Malaquías: «De improviso entrará
en el santuario el Señor, a quien ustedes buscan, el mensajero a quien
ustedes desean» (Ml 3, 1), evoca la intensidad del deseo que animó
la espera del pueblo judío a lo largo de los siglos.
La Carta a los hebreos nos presenta a Cristo -nuestro
«sumo sacerdote, compasivo y fiel»- como el mediador que une a Dios
y al hombre, superando las distancias y derribando todo muro. Es así
como expía los pecados del pueblo. Siendo todavía niño, comienza a
avanzar por el camino de la obediencia, que recorrerá hasta las últimas
consecuencias (Cfr. Heb 2, 17 y 5, 7-9)... La primera persona que se asocia a Cristo en el camino
de esta obediencia salvadora y ejemplar, es su madre, María, Madre
de Aquel que será «signo de contradicción» que le traspasará el alma
como una espada (Cfr. Lc 2, 32. 34). Al
llevar a su Hijo a Jerusalén, la Virgen Madre lo ofrece a Dios como
verdadero Cordero que quita el pecado del mundo, lo pone en manos
de Simeón y de Ana como anuncio de redención, y lo presenta a todos
como «luz» para avanzar por el camino seguro de la verdad y del amor.
En esta fiesta de la Presentación del Señor la Iglesia
celebra la «Jornada de la Vida Consagrada». Se trata de una ocasión
muy propicia para alabar al Señor y darle gracias por el don inestimable
que constituye la vida religiosa, en sus diferentes formas, para bien
de su Iglesia. Es, al mismo tiempo, una ocasión privilegiada para
promover en todo el pueblo de Dios el conocimiento y la estima por
quienes están totalmente consagrados a Dios... ¡Que el Señor renueve
cada día en ellos -y en todos los que hemos sido consagrados un día
por el Bautismo- el anhelo por dar una respuesta gozosa a su amor
gratuito y fiel!
PP.
Benedicto XVI
BENDICIÓN
DE LAS CANDELAS Y PROCESIÓN MR p. 672-675
[686]
ANTÍFONA
DE ENTRADA Sal 47, 10-11
Meditamos, Señor, los dones de tu amor, en medio de tu
templo. Tu alabanza llega hasta los confines de la tierra como tu
fama. Tu diestra está llena de justicia.
Se dice Gloria.
ORACIÓN COLECTA
Dios todopoderoso y eterno, suplicamos humildemente a
tu majestad que, así como en este día fue presentado al templo tu
Unigénito en su realidad humana como la nuestra, así nos concedas,
con el espíritu purificado, ser presentados ante ti. Por nuestro Señor
Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu
Santo y es Dios por los siglos de los siglos.
PRIMERA
LECTURA
[Entrará en el santuario el Señor, a quien
ustedes buscan.]
Del
libro del profeta Malaquías 3, 1-4
Esto dice el Señor: "He aquí que yo envío a mi mensajero.
Él preparará el camino delante de mí. De improviso entrará en el santuario
el Señor, a quien ustedes buscan, el mensajero de la alianza a quien
ustedes desean. Miren: Ya va entrando, dice el Señor de los ejércitos.
¿Quién podrá soportar el día de su venida? ¿Quién quedará
en pie cuando aparezca? Será como fuego de fundición, como la lejía
de los lavanderos. Se sentará como un fundidor que refina la plata;
como a la plata y al oro, refinará a los hijos de Leví y así podrán
ellos ofrecer, como es debido, las ofrendas al Señor.
Entonces agradará al Señor la ofrenda de Judá y de Jerusalén,
como en los días pasados, como en los años antiguos". Palabra de Dios.
SALMO
RESPONSORIAL del salmo 23
R/. El Señor es el rey de la gloria.
¡Puertas, ábranse de par en par; ¡agrándense, portones
eternos, porque va a entrar el rey de la gloria! R/.
¿Y quién es el rey de la gloria? Es el Señor, fuerte
y poderoso, el Señor, poderoso en la batalla. R/.
¡Puertas, ábranse de par en par, agrándense, portones
eternos, porque va a entrar el rey de la gloria! R/.
Y ¿quién es el rey de la gloria? El Señor, Dios de los
ejércitos, es el rey de la gloria. R/.
SEGUNDA
LECTURA
[Tenía que asemejarse en todo a sus hermanos.]
De
la carta a los hebreos 2, 14-18
Hermanos: Todos los hijos de una familia tienen la misma
sangre; por eso, Jesús quiso ser de nuestra misma sangre, para destruir
con su muerte al diablo, que mediante la
muerte, dominaba a los hombres, y para liberar a aquellos que, por
temor a la muerte, vivían como esclavos toda su vida.
Pues como bien saben, Jesús no vino a ayudar a los ángeles,
sino a los descendientes de Abraham; por eso tuvo que hacerse semejante
a sus hermanos en todo, a fin de llegar a ser sumo sacerdote, misericordioso
con ellos y fiel en las relaciones que median entre Dios y los hombres,
y expiar así los pecados del pueblo. Como él mismo fue probado por
medio del sufrimiento, puede ahora ayudar a los que están sometidos
a la prueba. Palabra de Dios.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO Lc 2, 32
R/. Aleluya, aleluya.
Cristo es la luz que alumbra a las naciones y la gloria
de tu pueblo, Israel. R/. Aleluya.
Lo que se encuentra entre [...] se puede omitir por motivos
pastorales.
EVANGELIO
[Mis ojos han visto al Salvador]
Del
santo Evangelio según san Lucas 2, 22-40
Transcurrido el tiempo de la purificación de María, según
la ley de Moisés, ella y José llevaron al niño a Jerusalén para presentarlo
al Señor, de acuerdo con lo escrito en la ley: Todo primogénito varón
será consagrado al Señor, y también para ofrecer, como dice la ley,
un par de tórtolas o dos pichones.
Vivía en Jerusalén un hombre llamado Simeón, varón justo
y temeroso de Dios, que aguardaba el consuelo de Israel; en él moraba
el Espíritu Santo, el cual le había revelado que no moriría sin haber
visto antes al Mesías del Señor. Movido por el Espíritu, fue al templo, y cuando
José y María entraban con el niño Jesús para cumplir con lo prescrito
por la ley, Simeón lo tomó en brazos y bendijo a Dios, diciendo:
"Señor, ya puedes dejar morir en paz a tu siervo, según
lo que me habías prometido, porque mis ojos han visto a tu Salvador,
al que has preparado para bien de todos los pueblos; luz que alumbra
a las naciones y gloria de tu pueblo, Israel".
[El padre y la madre del niño estaban admirados de semejantes
palabras. Simeón los bendijo, y a María, la madre de Jesús, le anunció:
"Este niño ha sido puesto para ruina y resurgimiento de muchos en
Israel, como signo que provocará contradicción, para que queden al
descubierto los pensamientos de todos los corazones. Y a ti, una espada
te atravesará el alma".
Había también una profetisa, Ana, hija de Fanuel, de la tribu de Aser. Era una mujer muy anciana.
De joven, había vivido siete años casada y tenía ya ochenta y cuatro
años de edad. No se apartaba del templo ni de día ni de noche, sirviendo
a Dios con ayunos y oraciones. Ana se acercó en aquel momento, dando
gracias a Dios y hablando del niño a todos los que aguardaban la liberación
de Jerusalén.
Una vez que José y María cumplieron todo lo que prescribía
la ley del Señor, se volvieron Galilea, a su ciudad de Nazaret. El
niño iba creciendo y fortaleciéndose, se llenaba de sabiduría y la
gracia de Dios está con él.] Palabra
del Señor.
Se dice Credo.
ORACIÓN
DE LOS FIELES:
Oremos a Jesús que -para cumplir la ley de Moisés- quiso
ser presentado en el templo y pidámosle que ruegue por nosotros sus
hermanos:
Para que Cristo, luz que
resplandece sobre la faz de la Iglesia, conceda a sus fieles convertirse
en luz del mundo y en sal de la tierra, roguemos al Señor.
Para que el Salvador del
mundo sea anunciado y presentado ante todos los pueblos y se revele
como luz de todas las naciones, roguemos al Señor.
Para que los ancianos y
los moribundos, al ver que se acerca el fin de sus días dejen este
mundo en paz, seguros de que -terminada su carrera- verán al Salvador,
roguemos al Señor.
Para que Cristo, luz que
alumbra a todo hombre que viene a este mundo, no sea para nosotros
causa de caída, sino de levantamiento y de resurrección, roguemos
al Señor.
Señor, Dios todopoderoso, que -en el final de su camino-
realizaste los deseos santos de los ancianos Simeón y Ana, haz que
también nuestros ojos puedan contemplar al Salvador en el templo eterno
de tu gloria. Él que vive y reina por los siglos de los siglos.
ORACIÓN
SOBRE LAS OFRENDAS
Que te sea grata, Señor, la ofrenda de tu Iglesia desbordante
de alegría, tú que quisiste que tu Unigénito te fuera ofrecido, como
Cordero inmaculado, para la vida del mundo. Él, que vive y reina por
los siglos de los siglos.
PREFACIO: El misterio de la Presentación del Señor.
En verdad es justo y necesario, es nuestro deber y salvación
darte gracias siempre y en todo lugar, Señor, Padre santo, Dios todopoderoso
y eterno.
Porque al ser presentado hoy en el templo tu Hijo, eterno
como tú, fue proclamado por el Espíritu Santo gloria de Israel y luz
de las naciones.
Por eso, nosotros, al acudir hoy llenos de júbilo al
encuentro del Salvador, te alabamos con los ángeles y los santos,
diciendo sin cesar: Santo, Santo, Santo...
ANTÍFONA
DE LA COMUNIÓN Lc
2, 30-31
Mis ojos han visto a tu Salvador, a quien has puesto
ante la vista de todos los pueblos.
ORACIÓN
DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Señor, por este santo sacramento que acabamos de recibir,
lleva a su plenitud en nosotros la obra de tu gracia, tú, que colmaste
las esperanzas de Simeón; para que, así como él no vio la muerte sin
que antes mereciera tener en sus brazos a Cristo, así nosotros, al
salir al encuentro del Señor, merezcamos alcanzar la vida eterna.
Él, que vive y reina por los siglos de los siglos.
Verde / Rojo /Blanco Feria o SAN BLAS, Obispo y Mártir o SAN OSCAR,
Obispo
MR pp. 677 y 883 [692 y 922] / Lecc I p. 557
El culto a san Blas, obispo de Sebaste
(Armenia), hacia el año 320, se extendió por el Occidente desde el
siglo XI gracias a todos los milagros que la tradición le atribuía.
Se le conoce como abogado especial de enfermedades de la garganta.
Se han construido desde entonces muchos templos en su honor.
ANTÍFONA
DE ENTRADA Ez 34, 11. 23-24
Este santo luchó hasta la muerte por la ley de Dios y
no se aterrorizó ante la amenaza de los impíos, pues estaba afianzado
sobre roca firme.
ORACIÓN COLECTA
Escucha, Señor, a tu pueblo que, con la ayuda del mártir
san Blas, te suplica le concedas gozar de paz en la vida presente,
y tu auxilio para alcanzar la vida eterna. Por nuestro Señor Jesucristo,
tu Hijo, que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo
y es Dios por los siglos de los siglos.
PRIMERA
LECTURA
[Por la fe, nuestros antepasados conquistaron
reinos y Dios dispone para nosotros algo mejor.]
De
la carta a los hebreos 11, 32-40
Hermanos: ¿Para qué seguir hablando sobre el poder de
la fe? Me faltaría tiempo, si tuviera que exponer en detalle lo que
hicieron Gedeón, Baruc, Sansón, Jefté, David,
Samuel y los profetas. Por su fe, ellos conquistaron reinos e hicieron
justicia, lograron que se fueran cumpliendo las promesas divinas,
cerraron las fauces de los leones, dominaron la violencia del fuego,
se salvaron del filo de la espada, vencieron las enfermedades, fueron
valientes en la guerra y pusieron en fuga a los ejércitos extranjeros.
Hubo también algunas mujeres, que por su fe obtuvieron
la resurrección de sus hijos muertos. Muchos, sometidos a las torturas,
prefirieron no ser rescatados, para alcanzar así la resurrección.
Unos sufrieron escarnios y azotes, cadenas y cárcel.
Otros, fueron apedreados, aserrados, torturados y muertos
a espada; anduvieron errantes, cubiertos con pieles de ovejas y de
cabras, faltos de todo, pasando necesidad, apuros y malos tratos.
Esos hombres, de los cuales no era digno el mundo, tuvieron
que vagar por desiertos y montañas, por grutas y cavernas. Sin embargo,
todos ellos, aunque acreditados por su fe, no alcanzaron a ver el
pleno cumplimiento de la promesa: es que Dios había dispuesto para
nosotros algo mejor y no quería que ellos llegaran, sin nosotros,
a la perfección. Palabra de Dios.
SALMO
RESPONSORIAL del salmo 30
R/. Quien confía en el Señor, no desespere.
¡Qué grande es la bondad que has reservado, Señor, para
tus fieles! Con quien se acoge a ti, Señor, ¡qué bueno eres! R/.
Tu presencia lo ampara de todas las intrigas de los hombres,
y lo pone a resguardo de las burlas y las murmuraciones. R/.
Bendito sea el Señor, que en mis horas de angustia ha
prodigado las pruebas de su amor.
R/.
En mi inquietud, Señor, llegué a pensar que me habías
quitado de tu vista; pero oíste la voz de mis plegarias cuando clamaba
a ti. R/.
Que amen al Señor todos sus fieles, pues protege a los
leales y a los soberbios da lo que merecen. R/.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO Lc 7, 16
R/. Aleluya, aleluya.
Un gran profeta ha surgido entre nosotros. Dios ha visitado
a su pueblo. R/. Aleluya.
EVANGELIO
[Espíritu inmundo, sal de este hombre.]
Del
santo Evangelio según san Marcos 5, 1-20
En aquel tiempo, después de atravesar el lago de Genesaret, Jesús y sus discípulos llegaron a la otra orilla,
a la región de los gerasenos. Apenas desembarcó
Jesús, vino corriendo desde el cementerio un hombre poseído por un
espíritu inmundo, que vivía en los sepulcros. Ya ni con cadenas podían
sujetarlo; a veces habían intentado sujetarlo con argollas y cadenas,
pero él rompía las cadenas y destrozaba las argollas; nadie tenía
fuerzas para dominarlo. Se pasaba días y noches en los sepulcros o
en el monte, gritando y golpeándose con piedras.
Cuando aquel hombre vio de lejos a Jesús, se echó a correr,
vino a postrarse ante él y gritó a voz en cuello: "¿Qué quieres tú
conmigo, Jesús, Hijo de Dios altísimo? Te ruego por Dios que no me
atormentes".
Dijo esto porque Jesús le había mandado al espíritu inmundo
que saliera de aquel hombre. Entonces le preguntó Jesús: "¿Cómo te
llamas?" Le respondió: "Me llamo Legión, porque somos muchos". Y le
rogaba con insistencia que no los expulsara de aquella comarca.
Había allí una gran piara de cerdos, que andaban comiendo
en la falda del monte. Los espíritus le rogaban a Jesús: "Déjanos
salir de aquí para meternos en esos cerdos". Y él se lo permitió.
Los espíritus inmundos salieron del hombre y se metieron
en los cerdos; y todos los cerdos, unos dos mil, se precipitaron por
el acantilado hacia el lago y se ahogaron.
Los que cuidaban los cerdos salieron huyendo y contaron
lo sucedido, en el pueblo y en el campo. La gente fue a ver lo que
había pasado. Se acercaron a Jesús y vieron al antes endemoniado,
ahora en su sano juicio, sentado y vestido. Entonces tuvieron miedo.
Y los que habían visto todo, les contaron lo que le había ocurrido
al endemoniado y lo de los cerdos. Ellos comenzaron a rogarle a Jesús
que se marchara de su comarca.
Mientras Jesús se embarcaba, el endemoniado le suplicaba
que lo admitiera en su compañía, pero él no se lo permitió y le dijo:
"Vete a tu casa a vivir con tu familia y cuéntales lo misericordioso
que ha sido el Señor contigo". Y aquel hombre se alejó de ahí y se
puso a proclamar por la región de Decápolis
lo que Jesús había hecho por él. Y todos los que lo oían se admiraban.
Palabra del Señor.
REFLEXIÓN:
La rara historia del endemoniado de Gerasa
-más allá de algunos aspectos descriptivos, ornamentales o controvertidos-
nos quiere dar a entender que el poder del mal es muy grande, pero
que éste tiene que retroceder ante la fuerza salvadora de Jesús. Él
es, además, quien es capaz de transformar a un furioso endemoniado
en una especie de agradecido "misionero". Paradójicamente y de manera
insospechada, es a través del testimonio de ese hombre, liberado del
poder del Maligno, como también a los paganos les viene anunciada
la Buena Nueva de la salvación.
ORACIÓN
SOBRE LAS OFRENDAS
Santifica, Señor, con tu bendición, los dones que te
presentamos, para que, por tu gracia, nos inflamen en aquel fuego
de tu amor con el que san Blas venció en su cuerpo todos los tormentos.
Por Jesucristo, nuestro Señor.
ANTÍFONA
DE LA COMUNIÓN Mt
16, 24
El que quiera venir conmigo, que renuncie a sí mismo,
que tome su cruz y que me siga, dice el Señor.
ORACIÓN
DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Que el santo sacramento que recibimos, Señor, nos comunique
aquella fortaleza de espíritu que hizo a tu mártir san Blas fiel en
tu servicio y victorioso en su pasión. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Rojo Memoria (anticipada en México),
SANTA AGUEDA, Virgen y
Mártir
MR pp. 678 y 891 [693 y 931] / Lecc. I p. 562
Joven siciliana que dio la vida por Cristo en Catania,
durante la persecución del emperador Decio
(251). Sus conciudadanos la invocan con mucha confianza, especialmente
en las erupciones del volcán Etna. Su culto se extendió pronto por
el Oriente y el Occidente.
ANTÍFONA DE ENTRADA
Ya sigue al Cordero crucificado por nosotros, la virgen
llena de valor, ofrenda de pudor y víctima de castidad.
ORACIÓN COLECTA
Te rogamos, Señor, que la santa virgen y mártir Águeda
implore para nosotros tu misericordia, ya que te fue siempre grata,
tanto por la fortaleza de su martirio como por el mérito de su virginidad.
Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina contigo en
la unidad del Espíritu Santo y es Dios por los siglos de los siglos.
PRIMERA
LECTURA
[Corramos con perseverancia la carrera
que tenemos por delante.]
De
la carta a los hebreos 12, 1-4
Hermanos: Rodeados, como estamos, por la multitud de
antepasados nuestros, que dieron prueba de su fe, dejemos todo lo
que nos estorba; librémonos del pecado que nos ata, para correr con
perseverancia la carrera que tenemos por delante, fija la mirada en
Jesús, autor y consumador de nuestra fe. Él, en vista del gozo que
se le proponía, aceptó la cruz, sin temer su ignominia, y por eso
está sentado a la derecha del trono de Dios. Mediten, pues, en el
ejemplo de aquel que quiso sufrir tanta oposición de parte de los
pecadores, y no se cansen ni pierdan el ánimo. Porque todavía no han
llegado a derramar su sangre en la lucha contra el pecado. Palabra
de Dios.
SALMO
RESPONSORIAL del salmo 21
R/. Alaben al Señor los que lo buscan.
Le cumpliré mis promesas al Señor delante de sus fieles.
Los pobres comerán hasta saciarse y alabarán al Señor los que lo buscan:
su corazón ha de vivir para siempre. R/.
Recordarán al Señor y volverán a él desde los últimos
lugares del mundo; en su presencia se postrarán todas las familias
de los pueblos. Sólo ante él se postrarán todos los que mueren. R/.
Mi descendencia lo servirá y le contará a la siguiente
generación, al pueblo que ha de nacer, la justicia del Señor y todo
lo que él ha hecho. R/.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO Mt 8, 17
R/. Aleluya, aleluya.
Cristo hizo suyas nuestras debilidades y cargó con nuestros
dolores. R/. Aleluya.
EVANGELIO
[¡Óyeme, niña, levántate!]
Del
santo Evangelio según san Marcos 5, 21-43
En aquel tiempo, cuando Jesús regresó en la barca al
otro lado del lago, se quedó en la orilla y ahí se le reunió mucha
gente.
Entonces se acercó uno de los jefes de la sinagoga, llamado
Jairo. Al ver a Jesús, se echó a sus pies y le suplicaba con insistencia:
"Mi hija está agonizando. Ven a imponerle las manos para que se cure
y viva". Jesús se fue con él, y mucha gente lo seguía y lo apretujaba.
Entre la gente había una mujer que padecía flujo de sangre
desde hacía doce años. Había sufrido mucho a manos de los médicos
y había gastado en eso toda su fortuna, pero en vez de mejorar, había
empeorado. Oyó hablar de Jesús, vino y se le acercó por detrás entre
la gente y le tocó el manto, pensando que, con sólo tocarle el vestido,
se curaría. Inmediatamente se le secó la fuente de su hemorragia y
sintió en su cuerpo que estaba curada.
Jesús notó al instante que una fuerza curativa había
salido de él, se volvió hacia la gente y les preguntó: "¿Quién ha
tocado mi manto?" Sus discípulos le contestaron: "Estás viendo cómo
te empuja la gente y todavía preguntas: "¿Quién me ha tocado?' "Pero
él seguía mirando alrededor, para descubrir quién había sido.
Entonces se acercó la mujer, asustada y temblorosa, al
comprender lo que había pasado; se postró a sus pies y le confesó
la verdad. Jesús la tranquilizó, diciendo: "Hija, tu fe te ha curado.
Vete en paz y queda sana de tu enfermedad". Todavía estaba hablando
Jesús, cuando unos criados llegaron de casa del jefe de la sinagoga
para decirle a éste: "Ya se murió tu hija. ¿Para qué sigues molestando
al Maestro?" Jesús alcanzó a oír lo que hablaban y le dijo al jefe
de la sinagoga: "No temas, basta que tengas fe". No permitió que lo
acompañaran más que Pedro, Santiago y Juan, el hermano de Santiago.
Al llegar a la casa del jefe de la sinagoga, vio Jesús
el alboroto de la gente y oyó los llantos y los alaridos que daban.
Entró y les dijo: "¿Qué significa tanto llanto y alboroto? La niña
no está muerta, está dormida". Y se reían de él.
Entonces Jesús echó fuera a la gente, y con los padres
de la niña y sus acompañantes, entró a donde estaba la niña. La tomó
de la mano y le dijo: "¡Talitá, kum!",
que significa: "¡Óyeme, niña, levántate!" La niña, que tenía doce
años, se levantó inmediatamente y se puso a caminaR/.
Todos se quedaron asombrados. Jesús les ordenó
severamente que no lo dijeran a nadie y les mandó que le dieran de
comer a la niña. Palabra del
Señor.
REFLEXIÓN:
Una mujer que sufre desde hace tiempo molestas hemorragias y una niña
que acaba de morir, son restituidas por Jesús a la salud y a la vida.
En el primero de los casos tiene eficacia el simple "contacto directo"
y hasta ingenioso de la interesada. En el segundo caso, en cambio,
se requiere la "intercesión" humilde e insistente, interpuesta por
el afligido padre.
Estamos ante dos milagros hermanados por un tema común:
la portentosa y eficaz intervención de Jesús. Ella está condicionada,
con todo, a la fe de aquellos que recurren a Él.
ORACIÓN
SOBRE LAS OFRENDAS
Te pedimos, Señor, que los dones que te presentamos en
la celebración de santa Águeda, por tu gracia, te sean agradables,
así como te fue grato el combate de su martirio. Por Jesucristo, nuestro
Señor.
ANTÍFONA
DE LA COMUNIÓN Apoc 7, 17
El Cordero, que está en el trono, los conducirá a las
fuentes del agua de la vida.
ORACIÓN
DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Señor Dios, que coronaste entre los santos a la bienaventurada
Águeda por la doble victoria de su virginidad y de su martirio, concédenos,
por la eficacia de este sacramento, que, venciendo valerosamente todo
mal, consigamos la gloria del cielo. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Rojo / Fiesta, SAN FELIPE DE JESÚS, Protomártir Mexicano
MR p. 678 [694] / Lecc. I p.
997
Felipe de las Casas (1572-1597), mártir, primer santo
mexicano, escogió el nombre de "Felipe de Jesús". Nació en la ciudad
de México. Era inquieto y travieso. Entró en la Orden franciscana
en la ciudad de Manila. Le concedieron ordenarse en su patria, pero
una tormenta lanzo el barco hacia las costas del Japón, en donde sufrió
el martirio, repitiendo el nombre de "¡Jesús!". Canonizado en 1862
ANTÍFONA
DE ENTRADA Flp
2, 10-11
Que al nombre de Jesús toda rodilla se doble, en el cielo,
en la tierra, en los abismos, y que toda lengua proclame que Jesucristo
es el Señor, para gloria de Dios Padre.
Se dice Gloria.
ORACIÓN COLECTA
Dios nuestro, que te dignaste aceptar la sangre de san
Felipe de Jesús como primicia de la fe de nuestro pueblo, concédenos,
por su intercesión, madurar en esa misma fe, para que demos testimonio
de ella no solo de palabra, sino, sobre todo, con los hechos de nuestra
vida diaria. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina
contigo en la unidad del Espíritu Santo y es Dios por los siglos de
los siglos.
PRIMERA
LECTURA
[Los aceptó como holocausto.]
Del
libro de la Sabiduría 3, 1-9
Las almas de los justos están en las manos de Dios y
no les alcanzará ningún tormento. Los insensatos pensaban que los
justos habían muerto, que su salida de este mundo era una desgracia
y
su salida de entre nosotros, una completa destrucción.
Pero los justos están en paz.
La gente pensaba que sus sufrimientos eran un castigo,
pero ellos esperaban confiadamente la inmortalidad. Después de breves
sufrimientos recibirán una abundante recompensa, pues Dios los puso
a prueba y los halló dignos de sí. Los probó como oro en el crisol
y los aceptó como un holocausto agradable.
En el día del juicio brillarán los justos como chispas
que se propagan en un cañaveral. Juzgarán a las naciones y dominarán
a los pueblos, y el Señor reinará eternamente sobre ellos.
Los que confían en el Señor comprenderán la verdad y
los que son fieles a su amor permanecerán a su lado, porque Dios ama
a sus elegidos y cuida de ellos. Palabra de Dios.
SALMO
RESPONSORIAL del salmo 123
R/. Nuestra ayuda es invocar al Señor.
Si el Señor no hubiera estado de nuestra parte cuando
los hombres nos asaltaron, nos habría devorado vivos el fuego de su
cólera. R/.
Las aguas nos hubieran sepultado, un torrente nos hubiera
llegado al cuello, un torrente de aguas encrespadas. Bendito sea el
Señor, porque no permitió que nos despedazaran con sus dientes. R/.
Nuestra vida se escapó como un pájaro de la trampa de
los cazadores. La trampa se rompió y nosotros escapamos. Nuestra ayuda
nos viene del Señor, que hizo el cielo y la tierra. R/.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO Mt 5, 10
R/. Aleluya, aleluya.
Dichosos los perseguidos por causa de la justicia, porque
de ellos es el Reino de los cielos, dice el Señor. R/. Aleluya.
EVANGELIO
[El que pierda su vida por mí, ése la encontrará.]
Del
santo Evangelio según san Lucas 9, 23-26
En aquel tiempo, Jesús le dijo a la multitud: "Si alguno
quiere acompañarme, que no se busque a sí mismo, que tome su cruz
de cada día y me siga. Pues el que quiera conservar para sí mismo
su vida, la perderá; pero el que la pierda por mi causa, ése la encontrará.
En efecto, ¿de qué le sirve al hombre ganar todo el mundo, si se pierde
a sí mismo o se destruye?
Por otra parte, si alguien se avergüenza de mí y de mi
doctrina, también el Hijo del hombre se avergonzará de él cuando venga
revestido de su gloria y de la del Padre y de la gloria de los santos
ángeles". Palabra del Señor.
REFLEXIÓN:
El problema de los justos que sufren y de los impíos que prosperan
había torturado, desde siempre, a los letrados de Israel, sobre todo
a partir del destierro. Hubo que esperar hasta el tiempo de los Macabeos,
para que -bajo la fuerte tensión religiosa producida por la persecución-
apareciera la esperanza en la resurrección. Y hubo que esperar hasta
el libro de la Sabiduría (s. I a.C.), para que este problema se iluminara
con nueva luz. Al justo le espera una vida de felicidad junto a Dios.
Este tan trascendental paso hacia adelante alcanzará su culmen en
la resurrección de Cristo... Este evangelio es uno de esos que quisiéramos
pasar por alto: quien quiera imitar a Jesús es invitado a seguirlo
y a estar dispuesto a compartir su estilo de vida. Jesús lo pide todo,
pero al mismo tiempo promete darlo todo. Él nos dio ejemplo de perderse
a sí mismo, entregándose por nosotros hasta el sacrificio de la cruz.
Jesús nos llama a confesarlo con valentía. Él nos llama, además, a
dejarlo todo y a estar dispuestos a seguirlo hasta las últimas consecuencias
y a ponernos en actitud de total donación a los demás.
ORACIÓN
SOBRE LAS OFRENDAS
Santifica, Señor, los dones que te presentamos y, por
la intercesión de san Felipe de Jesús, haz que nos sirvan de ayuda
para conseguir la vida eterna. Por Jesucristo, nuestro Señor.
ANTÍFONA
DE LA COMUNIÓN Mt
16, 24
Si alguno quiere venir conmigo, que renuncie a sí mismo,
que tome su cruz y me siga, dice el Señor.
ORACIÓN
DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Alimentados con el sagrado Cuerpo y la preciosa Sangre
de tu Hijo Jesucristo, te suplicamos humildemente, Señor, que, por
intercesión de tu mártir san Felipe de Jesús, nos veamos libres de
toda adversidad. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Rojo Memoria, SAN PABLO MIKI Y COMPAÑEROS MÁRTIRES,
MR pp. 679 y 878 [695 y 917] / Lecc I p. 572
El 5 de febrero de 1597, en Nagasaki (Japón) fueron crucificados
veintiséis cristianos (misioneros jesuitas y franciscanos, religiosos
japoneses, como Pablo Miki, y diecisiete
laicos: catequistas, intérpretes, médicos y niños). Sonriendo y cantando
sufrieron el martirio. (Entre ellos estaba san Felipe de Jesús).
ANTÍFONA DE ENTRADA
Ahora gozan en el cielo las almas de los santos, que
siguieron en la tierra las huellas de Cristo; y, porque lo amaron
hasta derramar su sangre por él, con Cristo se gozan eternamente.
ORACIÓN COLECTA
Dios nuestro, fortaleza de los santos, que por medio
de la cruz te dignaste llamar a la gloria a los santos mártires Pablo
Miki y compañeros, concédenos, por su intercesión, que mantengamos
firmemente hasta la muerte la fe que profesamos. Por nuestro Señor
Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu
Santo y es Dios por los siglos de los siglos.
PRIMERA
LECTURA
[Se han acercado ustedes a Sión, el monte y la ciudad del Dios viviente.]
De
la carta a los hebreos 12, 18-19. 21-24
Hermanos: Cuando ustedes se acercaron a Dios, no encontraron
nada material, como en el Sinaí: ni fuego ardiente, ni oscuridad,
ni tinieblas, ni huracán, ni estruendo de trompetas, ni palabras pronunciadas
por aquella voz que los israelitas no querían volver a oír nunca.
En efecto, tan terrible era aquel espectáculo, que el
mismo Moisés exclamó: ¡Estoy aterrorizado y tiemblo! Ustedes, en cambio,
se han acercado a Sión, el monte y la ciudad
del Dios viviente, a la Jerusalén celestial, a la reunión festiva
de miles y miles de ángeles, a la asamblea de los primogénitos, cuyos
nombres están escritos en el cielo. Se han acercado a Dios, que es
el juez de todos los hombres, y a los espíritus de los justos que
alcanzaron la perfección. Se han acercado a Jesús, el mediador de
la nueva alianza, cuya sangre derramada es más elocuente que la de
Abel. Palabra de Dios.
SALMO
RESPONSORIAL del salmo 47
R/. Recordamos, Señor, tu gran amor.
Grande es el Señor y muy digno de alabanza, en la ciudad
de nuestro Dios. Su monte santo, altura hermosa, es la alegría de
toda la tierra. R/.
El monte Sión, en el extremo
norte, es la ciudad del rey supremo. Entre sus baluartes ha surgido
Dios como una fortaleza inexpugnable. R/.
Lo que habíamos oído, lo hemos visto en la ciudad del
Dios de los ejércitos, en la ciudad de nuestro Dios, fundada para
siempre por Dios mismo. R/.
Recordamos, Señor, tu gran amor en medio de tu templo.
Tu renombre, Señor, y tu alabanza llenan el mundo entero. R/.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO Mc 1, 15
R/. Aleluya, aleluya.
El Reino de Dios está cerca, dice el Señor; arrepiéntanse
y crean en el Evangelio. R/. Aleluya.
EVANGELIO
[Envió a los discípulos de dos en dos.]
Del
santo Evangelio según san Marcos 6, 7-13
En aquel tiempo, llamó Jesús a los Doce, los envió de
dos en dos y les dio poder sobre los espíritus inmundos. Les mandó
que no llevaran nada para el camino: ni pan, ni mochila, ni dinero
en el cinto, sino únicamente un bastón, sandalias y una sola túnica.
Y les dijo: "Cuando entren en una casa, quédense en ella
hasta que se vayan de ese lugaR/.
Si en alguna parte no los reciben ni los escuchan,
al abandonar ese lugar, sacúdanse el polvo de los pies, como una advertencia
para ellos".
Los discípulos se fueron a predicar el arrepentimiento.
Expulsaban a los demonios, ungían con aceite a los enfermos y los
curaban. Palabra del Señor.
REFLEXIÓN:
Jesús, al decidirse a formar el nuevo pueblo de Dios, escoge y envía
a los «Doce» a una especie de "entrenamiento" temporal. Al realizar
este envío Él les comunica sus mismos poderes y les da también algunas
muy explícitas recomendaciones.
Su comprometedora misión, que tiene como tema principal
el anuncio del Reino de Dios y la conversión, ha de caracterizarse
fundamentalmente por la «pobreza». Tal actitud de confiado desprendimiento
-lo mismo en lo personal que en lo comunitario- les dará la «riqueza».
de una insospechada libertad de espíritu.
ORACIÓN
SOBRE LAS OFRENDAS
Recibe, Padre santo, las ofrendas que te presentamos
en la conmemoración de estos santos mártires y a nosotros tus siervos
concédenos permanecer siempre firmes en la confesión de tu nombre.
Por Jesucristo, nuestro Señor.
ANTÍFONA
DE LA COMUNIÓN Lc 22, 28-30
Ustedes han perseverado conmigo en mis pruebas, dice
el Señor, y yo les voy a dar el Reino, para que en él coman y beban
a mi mesa.
ORACIÓN
DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Señor Dios, que en tus santos mártires manifestaste de
modo admirable el misterio de la cruz, concede, benigno, que, fortalecidos
por este sacrificio, permanezcamos fielmente adheridos a Cristo y
trabajemos en la Iglesia por la salvación de todos. Por Jesucristo,
nuestro Señor.
Verde / Blanco Votiva del Sagrado Corazón
/ Lecc. I p. 575
ANTÍFONA
DE ENTRADA Sal 32, 11.19
Los designios del corazón de Dios permanecen para siempre:
él salva a sus fieles de la muerte y los sustenta en el tiempo de
indigencia.
ORACIÓN COLECTA
Señor y Dios nuestro, te pedimos que nos revistas con
las virtudes del Corazón de tu Hijo y nos enciendas con su amor, para
que configurados a imagen suya merezcamos participar de la redención
eterna. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina contigo
en la unidad del Espíritu Santo, y es Dios, por los siglos de los
siglos.
PRIMERA
LECTURA
[Jesucristo es el mismo ayer, hoy y siempre.]
De
la carta a los hebreos 13, 1-8
Hermanos: Conserven entre ustedes el amor fraterno y
no se olviden de practicar la hospitalidad, ya que, por ella, algunos
han hospedado ángeles sin saberlo. Acuérdense de los que están presos,
como si ustedes mismos estuvieran también con ellos en la cárcel.
Piensen en los que son maltratados, pues también ustedes tienen un
cuerpo que puede sufrir
Que todos tengan gran respeto al matrimonio y lleven
una vida conyugal irreprochable, porque a los que cometen fornicación
y adulterio, Dios los habrá de juzgar
Que no haya entre ustedes avidez de riquezas, sino que
cada quien se contente con lo que tiene. Dios ha dicho: Nunca te dejaré
ni te abandonaré; por lo tanto, nosotros podemos decir con plena confianza:
El Señor cuida de mí, ¿por qué les he de tener miedo a los hombres?
Acuérdense de sus pastores, que les predicaron la palabra
de Dios. Consideren cómo terminaron su vida e imiten su fe. Jesucristo
es el mismo ayer, hoy y siempre. Palabra de Dios.
SALMO
RESPONSORIAL del salmo 26
R/. El Señor es mi luz y mi salvación.
El Señor es mi luz y mi salvación, ¿a quién voy a tenerle
miedo? El Señor es la defensa de mi vida, ¿quién podrá hacerme temblar?
R/.
Aunque se lance contra mí un ejército, no temerá mi corazón;
aun cuando hagan la guerra contra mí, tendré plena confianza en el
Señor. R/.
Porque el Señor me procuró un refugio en los tiempos
aciagos; me esconderá en lo oculto de su tienda y él me pondrá a salvo.
R/.
El corazón me dice que te busque y buscándote estoy.
No me
abandones ni me dejes solo, mi Dios y salvadoR/. R/.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO Cfr. Lc 8, 15
R/. Aleluya, aleluya.
Dichosos los que cumplen la palabra del Señor con un
corazón bueno y sincero, y perseveran hasta dar fruto. R/. Aleluya
EVANGELIO
[Es Juan, a quien yo le corté la cabeza,
y que ha resucitado.]
Del
santo Evangelio según san Marcos 6, 14-29
En aquel tiempo, como la fama de Jesús se había extendido
tanto, llegó a oídos del rey Herodes el rumor de que Juan el Bautista
había resucitado y sus poderes actuaban en Jesús. Otros decían que
era Elías; y otros, que era un profeta, comparable a los antiguos.
Pero Herodes insistía: "Es Juan, a quien yo le corté la cabeza, y
que ha resucitado".
Herodes había mandado apresar a Juan y lo había metido
y encadenado en la cárcel. Herodes se había casado con Herodías, esposa
de su hermano Filipo, y Juan le decía: "No te está permitido tener
por mujer a la esposa de tu hermano". Por eso Herodes lo mandó encarcelaR/.
Herodías sentía por ello gran rencor contra Juan y quería
quitarle la vida; pero no sabía cómo, porque Herodes miraba con respeto
a Juan, pues sabía que era un hombre recto y santo, y lo tenía custodiado.
Cuando lo oía hablar, quedaba desconcertado, pero le gustaba escucharlo.
La ocasión llegó cuando Herodes dio un banquete a su
corte, a sus oficiales y a la gente principal de Galilea, con motivo
de su cumpleaños. La hija de Herodías bailó durante la fiesta y su
baile les gustó mucho a Herodes y a sus invitados. El rey le dijo
entonces a la joven: "Pídeme lo que quieras y yo te lo daré". Y le
juró varias veces: "Te daré lo que me pidas, aunque sea la mitad de
mi reino".
Ella fue a preguntarle a su madre: "¿Qué le pido?" Su
madre le contestó: "La cabeza de Juan el Bautista". Volvió ella inmediatamente
junto al rey y le dijo: "Quiero que me des ahora mismo, en una charola,
la cabeza de Juan el Bautista".
El rey se puso muy triste, pero debido a su juramento
y a los convidados, no quiso desairar a la joven, y enseguida mandó
a un verdugo que trajera la cabeza de Juan. El verdugo fue, lo decapitó
en la cárcel, trajo la cabeza en una charola, se la entregó a la joven
y ella se la entregó a su madre.
Al enterarse de esto, los discípulos de Juan fueron a
recoger el cadáver y lo sepultaron. Palabra
del Señor.
REFLEXIÓN:
El trágico destino del Bautista contrapone el heroico testimonio de
un «mártir» a la vengativa ligereza de Herodías. Es también un patente
reproche al vicioso y voluble Herodes, su cuñado y falso marido. Aparece
así el contraste entre dos distantes concepciones de la vida. Se puede
apreciar, además, lo que implica tomar en serio una «misión» profética.
En este sentido, la muerte de Juan se convierte en presagio
de una muerte semejante, que Jesús habrá de afrontar por instigación
de las corruptas autoridades religiosas y políticas de su pueblo.
ORACIÓN
SOBRE LAS OFRENDAS
Dios, Padre misericordioso, por el gran amor con que
nos amaste nos has entregado a tu Hijo único; te pedimos que, unidos
a él, podamos ofrecerte un homenaje digno de ti. Por Jesucristo, nuestro
Señor.
ANTÍFONA
DE COMUNIÓN Jn 7, 37.38
Dice el Señor: El que tenga sed venga a mí, y beba el
que cree en mí. De su seno brotarán manantiales de agua viva.
O bien: Jn
19, 34
Uno de los soldados atravesó con la lanza el costado
de Jesús, y enseguida brotó sangre y agua.
ORACIÓN
DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Después de celebrar el sacramento de tu amor, te suplicamos
humildemente, Señor, que configurados con Cristo en la tierra merezcamos
participar de su gloria en el cielo. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Verde / Blanco / Feria o SAN JERÓNIMO EMILIANI, Presbítero, o SANTA
JOSEFINA BAKHITA, Virgen
MR pp. 680 y 929 [696 y 969] / Lecc. I p. 580
El noble veneciano se convirtió del mal camino y desde
entonces consagró la vida a los indigentes, especialmente a los enfermos
y a los huérfanos. Junto con unos compañeros que se le unieron, fundó
en Somasca, la Sociedad de los Servidores de los Pobres. Murió
de peste, atendiendo a los enfermos (1486-1537).
ANTÍFONA
DE ENTRADA Cfr. Mc
10, 14
Dejen que los niños se acerquen a mí, y no se lo impidan,
porque de ellos es el Reino de Dios, dice el Señor.
ORACIÓN COLECTA
Dios, Padre de toda misericordia, que en tu providencia
quisiste que san Jerónimo Emiliani fuera
protector y padre de los huérfanos, concédenos, por su intercesión,
que conservemos con fidelidad el espíritu de adopción por el cual
nos llamamos y somos hijos tuyos. Por nuestro Señor Jesucristo, tu
Hijo, que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo y es
Dios por los siglos de los siglos.
PRIMERA
LECTURA
[Que el Dios de la paz, que resucitó al
pastor eterno de las ovejas, los enriquezca con toda clase de dones.]
De
la carta a los hebreos 13, 15-17. 20-21
Hermanos: Ofrezcamos continuamente a Dios, por medio
de Jesucristo, el sacrificio de alabanza, es decir el homenaje de
los labios que bendicen su nombre.
No se olviden nunca de practicar la generosidad y de
compartir con los demás los bienes de ustedes, porque estos son los
sacrificios que agradan a Dios. Obedezcan con docilidad a sus pastores,
pues ellos se desvelan por ustedes, sabiendo que tienen que rendir
cuentas a Dios. Así podrán ellos trabajar con alegría y sin quejarse,
pues lo contrario no sería para ustedes de ningún provecho
Que el Dios de la paz, el que, mediante la sangre de
una alianza eterna, resucitó de entre los muertos al pastor eterno
de las ovejas, Jesucristo, nuestro Señor, los enriquezca a ustedes
con toda clase de dones para cumplir su voluntad y haga en ustedes
todo lo que es de su agrado, por medio de Jesucristo, a quien sea
dada la gloria por los siglos de los siglos. Amén. Palabra de Dios.
SALMO
RESPONSORIAL del salmo 22
R/. El Señor
es mi pastor, nada me faltará.
El Señor es mi pastor, nada me falta; en verdes praderas
me hace reposar y hacia fuentes tranquilas me conduce, para reparar
mis fuerzas. R/.
Por ser un Dios fiel a sus promesas, me guía por el sendero
recto; así, aunque camine por cañadas oscuras, nada temo, porque tú
estás conmigo. Tu vara y tu cayado me dan seguridad. R/.
Tú mismo me preparas la mesa, a despecho de mis adversarios;
me unges la cabeza con perfume y llenas mi copa hasta los bordes.
R/.
Tu bondad y tu misericordia me acompañarán todos los
días de mi vida, y viviré en la casa del Señor por años sin término.
R/.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO Jn 10, 27
R/. Aleluya, aleluya.
Mis ovejas escuchan mi voz, dice el Señor; yo las conozco
y ellas me siguen. R/. Aleluya.
EVANGELIO
[Andaban como ovejas sin pastoR/. ]
Del
santo Evangelio según san Marcos 6, 30-34
En aquel tiempo, los apóstoles volvieron a reunirse con
Jesús y le contaron todo lo que habían hecho y enseñado. Entonces
él les dijo: "Vengan conmigo a un lugar solitario, para que descansen
un poco". Porque eran tantos los que iban y venían, que no les dejaban
tiempo ni para comeR/.
Jesús y sus apóstoles se dirigieron en una barca hacia
un lugar apartado y tranquilo. La gente los vio irse y los reconoció;
entonces de todos los poblados fueron corriendo por tierra a aquel
sitio y se les adelantaron.
Cuando Jesús desembarcó, vio una numerosa multitud que
lo estaba esperando y se compadeció de ellos, porque andaban como
ovejas sin pastor, y se puso a enseñarles muchas cosas. Palabra del Señor.
REFLEXIÓN:
Al retorno de su misión, los apóstoles refieren a Jesús -y, por cierto,
llenos de euforia- lo exitoso de sus actividades. Es conmovedor el
solícito comportamiento del Señor, que de inmediato se preocupa por
el debido reposo de los «Doce», una vez que han realizado sus fatigas
misioneras. Y no menos impresionante es la premura de las multitudes
«que no le dejaban tiempo ni para comer». En esta incontenible búsqueda
que la gente hace de Jesús, resalta el firme deseo de ir en pos de
un auténtico «pastor», el único capaz de compadecerse verdaderamente
de ellos.
ORACIÓN
SOBRE LAS OFRENDAS
Que te sea aceptable, Señor, la ofrenda de tu pueblo
santo en la conmemoración de san Jerónimo Emiliani,
y concede que, por la participación en este sacramento, demos pruebas
de tu amor. Por Jesucristo, nuestro Señor.
ANTÍFONA
DE LA COMUNIÓN Mt
18, 3
Dice el Señor: Si no cambian y se hacen como los niños,
no entrarán en el Reino de los cielos.
ORACIÓN
DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Que esta santa comunión, Dios todopoderoso, nos fortalezca,
para que, a ejemplo de san Jerónimo Emiliani,
podamos manifestar, tanto en nuestro corazón como con nuestras obras,
el amor fraterno y el esplendor de la verdad. Por Jesucristo, nuestro
Señor.
V DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO
Un amor «regenerante» y «gratuito» ...
(Ángelus, 7-II-2016)
El evangelio de este domingo cuenta la llamada de los
primeros discípulos de Jesús. El hecho tiene lugar en un contexto
de vida cotidiana: hay algunos pescadores sobre la orilla del mar
de Galilea, los cuales, después de una noche de trabajo sin pescar
nada, están lavando y organizando las redes... Jesús sube a la barca
de uno de ellos -la de Simón, llamado Pedro- le pide separarse un
poco de la orilla y se pone a predicar la Palabra de Dios a la gente
que se había reunido en gran número. Cuando terminó de hablar, le
dice a Pedro que se adentre en el mar para echar las redes. Y su fe
no se ve decepcionada: de hecho, las redes se llenaron de tal cantidad
de peces que «casi se rompían».
Frente a este evento extraordinario, viene naturalmente
el asombro. Y Simón Pedro no duda en arrojarse a los pies de Jesús
diciendo: «Señor, apártate de mí, que soy un pecador». Esta cercana
presencia despierta en Pedro un fuerte sentido de la propia mezquindad
e indignidad... La respuesta de Jesús es, sin embargo, tranquilizadora
y decidida: «No temas; desde ahora serás pescador de hombres». Y de
nuevo el pescador de Galilea -poniendo su confianza en esta palabra-
deja todo y sigue a Aquel que se ha convertido en su Maestro y Señor.
Y así hicieron también Santiago y Juan, compañeros
de trabajo de Simón... Esta es la lógica que guía la misión de Jesús
y la misión de la Iglesia: ir a buscar, a «pescar» a los hombres y
las mujeres -no para hacer proselitismo, sino para restituir a todos
a la plena dignidad y libertad- mediante el perdón de los pecados.
Esto es lo esencial del cristianismo: difundir el amor
regenerante y gratuito de Dios, con actitud
de acogida y de misericordia hacia todos, para que cada uno puede
encontrar la ternura de Dios y tener plenitud de vida... Todos, de alguna
manera, estamos llamados a confortar a cuantos se sienten pecadores
e indignos frente al Señor y abatidos por los propios errores, diciéndoles
las mismas palabras de Jesús: «¡No temas!» ... ¡Que la Virgen María
nos ayude a comprender cada vez más que ser discípulos significa poner
nuestros pies en las huellas dejadas por el Maestro: son las huellas
de la gracia divina que regenera vida para todos!
Papa
Francisco
MR p. 417 [415] / Lecc.
I p. 276. LH Semana I del Salterio.
ANTÍFONA
DE ENTRADA Sal 94, 6-7
Entremos y adoremos de rodillas al Señor, creador nuestro,
porque él es nuestro Dios.
Se dice Gloria.
ORACIÓN COLECTA
Te rogamos, Señor, que guardes con incesante amor a tu
familia santa, que tiene puesto su apoyo sólo en tu gracia, para que
halle siempre en tu protección su fortaleza. Por nuestro Señor Jesucristo,
tu Hijo, que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo
y es Dios por los siglos de los siglos.
PRIMERA
LECTURA
[Aquí estoy, Señor, envíame.]
Del
libro del profeta Isaías 6, 1-2a. 3-8
El año de la muerte del rey Ozías,
vi al Señor, sentado sobre un trono muy alto y magnífico. La orla
de su manto llenaba el templo. Había dos serafines junto a él, con
seis alas cada uno, que se gritaban el uno al otro: "Santo, santo,
santo es el Señor, Dios de los ejércitos; su gloria llena toda la
tierra".
Temblaban las puertas al clamor de su voz y el templo
se llenaba de humo. Entonces exclamé: "¡Ay de mí!, estoy perdido,
porque soy un hombre de labios impuros, que habito en medio de un
pueblo de labios impuros, porque he visto con mis ojos al Rey y Señor
de los ejércitos".
Después voló hacia mí uno de los serafines. Llevaba en
la mano una brasa, que había tomado del altar con unas tenazas. Con
la brasa me tocó la boca, diciéndome: "Mira: Esto ha tocado tus labios.
Tu iniquidad ha sido quitada y tus pecados están perdonados".
Escuché entonces la voz del Señor que decía: "¿A quién
enviaré? ¿Quién irá de parte mía?" Yo le respondí: "Aquí estoy, Señor,
envíame". Palabra de Dios.
SALMO
RESPONSORIAL del salmo 137
R/. Cuando te invocamos, Señor, nos escuchaste.
De todo corazón te damos gracias, Señor, porque escuchaste
nuestros ruegos. Te cantaremos delante de tus ángeles, te adoraremos
en tu templo. R/.
Señor, te damos gracias por tu lealtad y por tu amor:
siempre que te invocamos nos oíste y nos llenaste de valoR/.
R/.
Que todos los reyes de la tierra te reconozcan, al escuchar
tus prodigios. Que alaben tus caminos, porque tu gloria es inmensa.
R/.
Tu mano, Señor, nos pondrá a salvo, y así concluirás
en nosotros tu obra. Señor, tu amor perdura eternamente; obra tuya
soy, no me abandones. R/.
Lo que va entre [
] puede omitirse por motivos pastorales.
SEGUNDA
LECTURA
[Esto es lo que hemos predicado y lo que
ustedes han creído.]
De
la primera carta del apóstol san Pablo a los corintios 15, 1-11
Hermanos: [Les recuerdo el Evangelio que yo les prediqué
y que ustedes aceptaron y en el cual están firmes. Este Evangelio
los salvará, si lo cumplen tal y como yo lo prediqué. De otro modo,
habrán creído en vano.]
Les transmití, ante todo, lo que yo mismo recibí: que
Cristo murió por nuestros pecados, como dicen las Escrituras; que
fue sepultado y que resucitó al tercer día, según estaba escrito;
que se le apareció a Pedro y luego a los Doce; después se apareció
a más de quinientos hermanos reunidos, la mayoría de los cuales vive
aún y otros ya murieron. Más tarde se le apareció a Santiago y luego
a todos los apóstoles.
Finalmente, se me apareció también a mí, que soy como
un aborto. [Porque yo perseguí a la Iglesia de Dios y por eso soy
el último de los apóstoles e indigno de llamarme apóstol. Sin embargo,
por la gracia de Dios, soy lo que soy, y su gracia no ha sido estéril
en mí; al contrario, he trabajado más que todos ellos, aunque no he
sido yo, sino la gracia de Dios, que está conmigo.]
De cualquier manera, sea yo, sean ellos, esto es lo que
nosotros predicamos y esto mismo lo que ustedes han creído. Palabra
de Dios.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO Mt 4, 19
R/. Aleluya, aleluya.
Síganme, dice el Señor, y yo los haré pescadores de hombres.
R/. Aleluya.
EVANGELIO
[Dejándolo todo, lo siguieron.]
Del
santo Evangelio según san Lucas 5, 1-11
En aquel tiempo, Jesús estaba a orillas del lago de Genesaret y la gente se agolpaba en torno suyo para oír la
palabra de Dios. Jesús vio dos barcas que estaban junto a la orilla.
Los pescadores habían desembarcado y estaban lavando las redes.
Subió Jesús a una de las barcas, la de Simón, le pidió
que la alejara un poco de tierra, y sentado en la barca, enseñaba
a la multitud. Cuando acabó de hablar, dijo a Simón: "Lleva la barca
mar adentro y echen sus redes para pescar". Simón replicó: "Maestro,
hemos trabajado toda la noche y no hemos pescado nada; pero, confiado
en tu palabra, echaré las redes". Así lo hizo y cogieron tal cantidad
de pescados, que las redes se rompían. Entonces hicieron señas a sus
compañeros, que estaban en la otra barca, para que vinieran a ayudarlos.
Vinieron ellos y llenaron tanto las dos barcas, que casi se hundían.
Al ver esto, Simón Pedro se arrojó a los pies de Jesús
y le dijo: "¡Apártate de mí, Señor, porque soy un
pecador!" Porque tanto él como sus compañeros estaban llenos
de asombro al ver la pesca que habían conseguido. Lo mismo les pasaba
a Santiago y a Juan, hijos de Zebedeo, que eran compañeros de Simón.
Entonces Jesús le dijo a Simón: "No temas; desde ahora
serás pescador de hombres". Luego llevaron las barcas a tierra, y
dejándolo todo, lo siguieron. Palabra
del Señor.
Se dice Credo.
ORACIÓN
DE LOS FIELES:
Oremos al Padre del Unigénito, al Hijo del Dios eterno
y al Espíritu, fuente de todo bien:
Para que la Iglesia inmaculada
del Dios verdadero, extendida por todo el mundo, alcance la plena
riqueza del amor de Dios. Roguemos al Señor.
Para que los que gobiernan
los pueblos y tienen en su mano el destino de los hombres, se abran
al espíritu de justicia y al deseo de servir con dedicación a sus
conciudadanos. Roguemos al Señor.
Para que los débiles que
se ven oprimidos y los justos que sufren persecución, obtengan el
espíritu de fortaleza, que los haga perseverar en la fidelidad al
Señor. Roguemos al Señor.
Para que todos los que nos
hemos reunido para esta celebración lleguemos a tener un santo temor
de Dios, un amor ferviente, una vida feliz y una santa muerte. Roguemos
al Señor.
Dios nuestro, que has confiado a nuestros labios impuros
y a nuestras fuerzas débiles la misión de proclamar el Evangelio,
susténtanos con tu Espíritu para que tu palabra sea aceptada por los
hombres con corazón generoso y dé fruto abundante en todo el mundo.
Por Jesucristo, nuestro Señor.
ORACIÓN
SOBRE LAS OFRENDAS
Señor Dios nuestro, que has creado los frutos de la tierra
sobre todo para ayuda de nuestra fragilidad, concédenos que también
se conviertan para nosotros en sacramento de eternidad. Por Jesucristo,
nuestro Señor.
ANTÍFONA
DE LA COMUNIÓN Cfr. Sal 106, 8-9
Demos gracias al Señor por su misericordia, por las maravillas
que hace en favor de su pueblo; porque da de beber al que tiene sed
y les da de comer a los hambrientos.
ORACIÓN
DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Señor Dios, que quisiste hacernos participar de un mismo
pan y un mismo cáliz, concédenos vivir de tal manera, que, hechos
uno en Cristo, demos fruto con alegría para la salvación del mundo.
Por Jesucristo, nuestro Señor.
Rojo/Blanco / Memoria, SAN JOSÉ SÁNCHEZ DEL RÍO, Mártir Mexicano
o SANTA ESCOLÁSTICA, Virgen,
MR p. 883 [922] [Oraciòn Colecta
propia] / Lecc. I p. 584
ANTÍFONA DE ENTRADA
Este santo luchó hasta la muerte por la ley de Dios y
no se aterrorizó ante la amenaza de los impíos, pues estaba afianzado
sobre roca firme.
ORACIÓN COLECTA
Señor Dios, que otorgaste la palma del martirio a San
José Sánchez del Río al profesar y defender con su sangre la fe en
Cristo, Rey del Universo. Concédenos, por su intercesión, alcanzar
la gracia de ser como él: fuertes en la fe, seguros en la esperanza
y constantes en la caridad. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo,
que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo y es Dios
por los siglos de los siglos.
PRIMERA
LECTURA
[Dios dijo y así fue.]
Del
libro del Génesis 1, 1-19
En el principio creó Dios el cielo y la tierra. La tierra
era soledad y caos; y las tinieblas cubrían la faz del abismo. El
espíritu de Dios se movía sobre la superficie de las aguas. Dijo Dios:
"Que exista la luz", y la luz existió. Vio Dios que la luz era buena,
y separó la luz de las tinieblas. Llamó a la luz "día" y a las tinieblas,
"noche". Fue la tarde y la mañana del primer día.
Dijo Dios: "Que haya una bóveda entre las aguas, que
separe unas aguas de otras". E hizo Dios una bóveda y separó con ella
las aguas de arriba, de las aguas de abajo. Y así fue. Llamó Dios
a la bóveda "cielo". Fue la tarde y la mañana del segundo día.'
Dijo Dios: "Que se junten las aguas de debajo del cielo
en un solo lugar y que aparezca el suelo seco". Y así fue. Llamó Dios
"tierra" al suelo seco y "mar" a la masa de las aguas. Y vio Dios
que era bueno.
Dijo Dios: "Verdee la tierra con plantas que den semilla
y árboles que den fruto y semilla, según su especie, sobre la tierra".
Y así fue. Brotó de la tierra hierba verde, que producía semilla,
según su especie, y árboles que daban fruto y llevaban semilla, según
su especie. Y vio Dios que era bueno. Fue la tarde y la mañana del
tercer día.
Dijo Dios: "Que haya lumbreras en la bóveda del cielo,
que separen el día de la noche, señalen las estaciones, los días y
los años, y luzcan en la bóveda del cielo para iluminar la tierra".
Y así fue. Hizo Dios las dos grandes lumbreras: la lumbrera mayor
para regir el día y la menor, para regir la noche; y también hizo
las estrellas. Dios puso las lumbreras en la bóveda del cielo para
iluminar la tierra, para regir el día y la noche, y separar la luz
de las tinieblas. Y vio Dios que era bueno. Fue la tarde y la mañana
del cuarto día. Palabra de
Dios.
SALMO
RESPONSORIAL del salmo 103
R/. Bendice al Señor, alma mía.
Bendice al Señor, alma mía; Señor y Dios mío, inmensa
es tu grandeza. Te vistes de belleza y majestad, la luz te envuelve
como un manto. R/.
Sobre bases inconmovibles asentaste la tierra para siempre.
Con un vestido de mares la cubriste y las aguas en los montes concentraste.
R/.
En los valles haces brotar las fuentes, que van corriendo
entre montañas; junto al arroyo vienen a vivir las aves, que cantan
entre las ramas. R/.
¡Qué numerosas son tus obras, Señor,
y todas las hiciste con maestría! La tierra está llena de tus
creaturas. Bendice, al Señor, alma mía. R/.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO Cfr. Mt
4, 23
R/. Aleluya, aleluya.
Jesús predicaba la buena nueva del reino y curaba a la
gente de toda enfermedad. R/. Aleluya.
EVANGELIO
[Cuantos tocaban a Jesús quedaban curados.]
Del
santo Evangelio según san Marcos 6, 53-56
En aquel tiempo, Jesús y sus discípulos terminaron la
travesía del lago y tocaron tierra en Genesaret.
Apenas bajaron de la barca, la gente los reconoció y
de toda aquella región acudían a él, a cualquier parte donde sabían
que se encontraba, y le llevaban en camillas a los enfermos.
A dondequiera que llegaba, en los poblados, ciudades
o caseríos, la gente le ponía a sus enfermos
en la calle y le rogaba que por lo menos los dejara tocar la punta
de su manto; y cuantos lo tocaban, quedaban curados. Palabra
del Señor.
REFLEXIÓN:
San Marcos nos describe con rasgos muy sencillos a Jesús, ocupado
en recorrer todos los pueblos del territorio de Genesaret,
mientras va sanando a muchos enfermos. Tanta era la fe en Él, que
la gente estaba convencida de que les bastaba un casi "mágico" «tocar
la punta de su manto» para reencontrar la salud. Muy pocas veces ellos
se dan cuenta, sin embargo, de que esta su tan interesada y superficial
"credulidad" no habría de ser suficiente para hacer nacer en su corazón
la verdadera «fe». Lo que todos necesitaban era una fe viva y comprometida
en la persona y en la misión de Jesús.
ORACIÓN
SOBRE LAS OFRENDAS
Santifica, Señor, con tu bendición, los dones que te
presentamos, para que, por tu gracia, nos inflamen en aquel fuego
de tu amor con el que san José Sánchez del Río venció en su cuerpo
todos los tormentos. Por Jesucristo, nuestro Señor.
ANTÍFONA
DE LA COMUNIÓN Cfr. Mt 16, 24
El que quiera venir conmigo, que renuncie a sí mismo,
que tome su cruz y que me siga, dice el Señor.
ORACIÓN
DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Que el santo sacramento que recibimos, Señor, nos comunique
aquella fortaleza de espíritu que hizo a tu mártir José Sánchez del
Río fiel en tu servicio y victorioso en su pasión. Por Jesucristo,
nuestro Señor.
Verde / Blanco / Feria o NUESTRA SEÑORA DE LOURDES,
Jornada
Mundial del Enfermo,
MR pp. 681 y 867 [697 y 906] / Lecc. I p. 589
Desde las semanas situadas entre el 11 de febrero y el
16 de julio de 1858, la gruta de Massabielle
atrajo enormes multitudes a Lourdes. Invocando a la Inmaculada Madre
de Dios, que se apareció a Bernardita en la gruta, el pueblo cristiano
descubre en María la imagen de la Iglesia futura, la anticipación
de la nueva Jerusalén, cuyas puertas están abiertas a todas las naciones.
ANTÍFONA DE ENTRADA
Dichosa tú, Virgen María, que llevaste en tu seno al
creador del universo; diste a luz al que te creó, y permaneces Virgen
para siempre.
ORACIÓN COLECTA
Concédenos, Dios misericordioso, auxilio en nuestra fragilidad,
para que, quienes celebramos la conmemoración de la inmaculada Madre
de Dios, con la ayuda de su intercesión nos veamos libres de nuestras
culpas. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina contigo
en la unidad del Espíritu Santo y es Dios por los siglos de los siglos.
PRIMERA
LECTURA
[Hagamos al hombre a nuestra imagen y semejanza.]
Del
libro del Génesis 1, 20-2, 4a
Dijo Dios: "Agítense las aguas con un hervidero de seres
vivientes y revoloteen sobre la tierra las aves, bajo la bóveda del
cielo". Creó Dios los grandes animales marinos y los vivientes que
en el agua se deslizan y la pueblan, según su especie. Creó también
el mundo de las aves, según sus especies. Vio Dios que era bueno y
los bendijo, diciendo: "Sean fecundos y multiplíquense; llenen las
aguas del mar; que las aves se multipliquen en la tierra". Fue la
tarde y la mañana del quinto día.
Dijo Dios: "Produzca la tierra, vivientes según sus especies:
animales domésticos, reptiles y fieras, según sus especies". Y así
fue. Hizo Dios las fieras, los animales domésticos y los reptiles,
cada uno según su especie. Y vio Dios que era bueno.
Dijo Dios: "Hagamos al hombre a nuestra imagen y semejanza;
que domine a los peces del mar, a las aves del cielo, a los animales
domésticos y a todo animal que se arrastra sobre la tierra". Y creó
Dios al hombre a su imagen; a imagen suya lo creó; hombre y mujer
los creó. Y los bendijo Dios y les dijo: "Sean fecundos y multiplíquense,
llenen la tierra y sométanla; dominen a los peces del mar, a las aves
del cielo y a todo ser viviente que se mueve sobre la tierra".
Y dijo Dios: "He aquí que les entrego todas las plantas
de semilla que hay sobre la faz de la tierra, y todos los árboles
que producen frutos y semilla, para que les sirvan de alimento. Y
a todas las fieras de la tierra, a todas las aves del cielo, a todos
los reptiles de la tierra, a todos los seres que respiran, también
les doy por alimento las verdes plantas". Y así fue. Vio Dios todo
lo que había hecho y lo encontró muy bueno. Fue la tarde y la mañana
del sexto día.
Así quedaron concluidos el cielo y la tierra con todos
sus ornamentos, y terminada su obra, descansó Dios el séptimo día
de todo cuanto había hecho. Dios bendijo el séptimo día y lo consagró,
porque ese día cesó de trabajar en la creación del universo. Esta
es la historia de la creación del cielo y de la tierra. Palabra
de Dios.
SALMO
RESPONSORIAL del salmo 8
R/. ¡Qué admirable Señor, es tu poder!
Cuando contemplo el cielo, obra de tus manos, la luna
y las estrellas, que has creado, me pregunto: ¿Qué es el hombre, para
que de él te acuerdes; ese pobre ser humano, para
que de él te preocupes? R/.
Sin embargo, lo hiciste un poquito inferior a los ángeles,
lo coronaste de gloria y dignidad, le diste el mando sobre las obras
de tus manos y todo lo sometiste bajo sus pies. R/.
Pusiste a su servicio los rebaños y las manadas, todos
los animales salvajes, las aves del cielo y los peces del mar que
recorren los caminos de las aguas. R/.
ACLAMACIÓN
ANTES DEL EVANGELIO Sal 118, 36. 29
R/. Aleluya, aleluya.
Inclina, Dios mío, mi corazón a tus preceptos y dame
la gracia de cumplir tu voluntad. R/. Aleluya.
EVANGELIO
[Ustedes anulan la palabra de Dios con
las tradiciones de los hombres.]
Del
santo Evangelio según san Marcos 7, 1-13
En aquel tiempo, se acercaron a Jesús los fariseos y
algunos escribas venidos de Jerusalén. Viendo que algunos de los discípulos
de Jesús comían con las manos impuras, es decir, sin habérselas lavado,
los fariseos y los escribas le preguntaron:
"¿Por qué tus discípulos comen con manos impuras, y no
siguen la tradición de nuestros mayores?" (Los fariseos y los judíos,
en general, no comen sin lavarse antes las manos hasta el codo, siguiendo
la tradición de sus mayores; al volver del mercado, no comen sin hacer
primero las abluciones, y observan muchas otras cosas por tradición,
como purificar los vasos, las jarras y las ollas).
Jesús les contestó: "¡Qué bien profetizó Isaías sobre
ustedes, hipócritas, cuando escribió: Este pueblo
me honra con los labios, pero su corazón está lejos de mí!
Es inútil el culto que me rinden, porque enseñan doctrinas que no
son sino preceptos humanos.
Ustedes dejan a un lado el mandamiento de Dios, para
aferrarse a las tradiciones de los hombres".
Después añadió: "De veras son ustedes muy hábiles para
violar el mandamiento de Dios y conservar su tradición. Porque Moisés
dijo: Honra a tu padre y a tu madre. El que maldiga a su padre o a
su madre, morirá. Pero ustedes dicen: 'Si uno dice a su padre o a
su madre: Todo aquello con que yo te podría ayudar es corbán
(es decir, ofrenda para el templo), ya no puede hacer nada por su
padre o por su madre'. Así anulan la palabra de Dios con esa tradición
que se han transmitido. Y hacen muchas cosas semejantes a ésta". Palabra
del Señor.
REFLEXIÓN:
San Marcos reúne aquí los principales elementos de la "nueva ética"
de Jesús. Él, al evocar la gran tradición de los profetas, quiere
de los suyos una pureza auténticamente religiosa (Cfr.
Is, 29, 13). Él exige, además, un comportamiento no basada
sólo en exterioridades. De ahí que Él rechace, por ejemplo, unas tradiciones
puramente humanas -e incluso hasta tramposas- como sucede con el famoso
«corbán». Para Él no es la superficie lo que más cuenta, sino
el interior, el «corazón» como profundidad del alma. Por algo Jesús
exime de cualquier «precepto humano» cuando éste es contrario a la
ley de Dios.
ORACIÓN
SOBRE LAS OFRENDAS
Al venerar la memoria de la Madre de tu Hijo, te rogamos,
Señor, que la ofrenda que te presentamos nos transforme, por la abundancia
de tu gracia, en ofrenda permanente. Por Jesucristo, nuestro Señor.
ANTÍFONA
DE LA COMUNIÓN Lc
1, 49
Ha hecho en mí grandes cosas el que todo lo puede. Santo
es su nombre.
ORACIÓN
DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Ya que nos has concedido participar de la redención eterna,
te rogamos, Señor, que, quienes celebramos la conmemoración de la
Madre de tu Hijo, no sólo nos gloriemos de la plenitud de tu gracia,
sino que experimentemos también un continuo aumento de salvación.
Por Jesucristo, nuestro Señor.
Verde / Feria o Misa por la paz y la justicia
MR p. 1087 [1133] / Lecc I
p. 594
ANTÍFONA DE ENTRADA Cfr. Sir 36, 18-19
Concede, Señor, la paz a
quienes en ti esperan; escucha las oraciones de tus hijos y guíanos
por el camino de la justicia.
ORACIÓN COLECTA
Señor Dios, que revelaste
que han de ser llamados hijos tuyos quienes promueven la paz, concédenos
trabajar incansablemente por establecer la justicia, que es la única
que garantiza una paz firme y verdadera. Por nuestro Señor Jesucristo,
tu Hijo, que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo
y es Dios por los siglos de los siglos.
PRIMERA LECTURA
[El Señor
Dios tomó al hombre y lo puso en el jardín del Edén.]
Del libro del Génesis 2, 4b-9. 15-17
Cuando el Señor Dios hizo
el cielo y la tierra, no había ningún arbusto en el campo, ni había
brotado ninguna hierba silvestre, pues el Señor Dios no había hecho
llover sobre la tierra y no había hombres que labraran el suelo y
abrieran canales para que corriera el agua y se regaran los campos.
Un día, el Señor Dios tomó
polvo del suelo y con él formó al hombre; le sopló en las narices
un aliento de vida, y el hombre comenzó a viviR/.
Después plantó el Señor un jardín al oriente
del Edén y allí puso al hombre que había formado. El Señor Dios hizo
germinar del suelo toda clase de árboles, de hermoso aspecto y sabrosos
frutos, y además, en medio del jardín, el árbol de la vida y el árbol
del conocimiento del bien y del mal. El Señor Dios tomó al hombre
y lo puso en el jardín del Edén, para que lo cultivara y lo cuidara.
El Señor Dios le dio al
hombre esta orden: "Puedes comer de todos los árboles del jardín;
pero del árbol del conocimiento salen de dentro y manchan al hombre".
Palabra del Señor.
REFLEXIÓN:
Una interesante lección dada por Jesús a los suyos está relacionada
con lo "puro" o "impuro". En un ambiente de gran intimidad, Él les
aclara que lo que en realidad «mancha» no es lo que viene del exterior
sino lo que procede del «corazón» del hombre. Es decir, lo que expresa
sus buenas o malas intenciones. De esta forma, Él ancla la ética a
las decisiones tomadas de acuerdo a la propia conciencia.
Todos hemos de tener una
mirada limpia y una actitud optimista frente a las cosas creadas,
que en sí mismas -y de acuerdo a su Hacedor- han sido declaradas como
«muy buenas» (Cfr. Gen 1, 31).
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Te rogamos, Señor, que el
sacrificio de salvación de tu Hijo, Rey de la paz, ofrecido bajo estos
signos sacramentales con los que se simbolizan la paz y la unidad,
sirva para estrechar la concordia entre todos tus hijos. Por Jesucristo,
nuestro Señor.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Mt 5, 9
Dichosos los que trabajan
por la paz, porque se les llamará hijos de Dios.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Concédenos, Señor, en abundancia,
el espíritu de caridad, para que, alimentados con el Cuerpo y la Sangre
de tu Unigénito, fomentemos con eficacia entre todos
la paz que él mismo nos dejó. El, que vive y reina por los
siglos de los siglos.
Verde / Feria o Misa para pedir la caridad
MR p. 1097
[1143] / Lecc. I p. 598
ANTÍFONA DE ENTRADA Ez
36, 26-28
Dice el Señor: Arrancaré
de ustedes el corazón de piedra y les daré un corazón de carne, les
infundiré mi espíritu. Ustedes serán mi pueblo y yo seré su Dios.
ORACIÓN COLECTA
Inflama, Señor, nuestros
corazones con el Espíritu de tu amor, para que podamos pensar siempre
lo que es digno y agradable a tus ojos y amarte sinceramente en los
hermanos. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina
contigo en la unidad del Espíritu Santo y es Dios por los siglos de
los siglos.
PRIMERA LECTURA
[Serán los
dos una sola cosa.]
Del libro el Génesis 2, 18-25
En aquel día, dijo el Señor
Dios: "No es bueno que el hombre esté solo. Voy a hacerle a alguien
como él, para que lo ayude".
Entonces el Señor Dios formó de la tierra todas las bestias del campo y todos los pájaros del cielo y los llevó ante Adán, para que les pusiera nombre y así todo ser
viviente tuviera el nombre
puesto por Adán.
Así, pues, Adán les puso
nombre a todos los animales domésticos, a los pájaros del cielo y
a las bestias del campo; pero no hubo ningún ser semejante a Adán,
para ayudarlo.
Entonces el Señor Dios hizo
caer al hombre en un profundo sueño, y mientras dormía, le sacó una
costilla y cerró la carne sobre el lugar vacío. Y de la costilla que
le había sacado al hombre, Dios formó una mujeR/.
Se la llevó al hombre y éste exclamó: "Esta sí
es hueso de mis huesos y carne de mi carne. Esta será llamada mujer,
porque ha sido formada del hombre".
Por eso el hombre abandonará
a su padre y a su madre, y se unirá a su mujer y serán los dos una
sola cosa. Por entonces los dos estaban desnudos, el hombre y su mujer,
pero no sentían vergüenza por ello. Palabra
de Dios.
SALMO RESPONSORIAL del salmo 127
R/. Dichoso el que teme al Señor.
Dichoso el que teme al Señor
y sigue sus caminos: comerá del fruto de su trabajo, será dichoso,
le irá bien. R/.
Su mujer, como vid fecunda,
en medio de su casa; sus hijos, como renuevos de olivo, alrededor
de su mesa. R/.
Esta es la bendición del
hombre que teme al Señor: "Que el Señor te bendiga desde Sión,
que veas la prosperidad de Jerusalén todos los días de tu vida". R/.
ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO Sant 1, 21
R/. Aleluya, aleluya.
Acepten dócilmente la palabra
que ha sido sembrada en ustedes y es capaz de salvarlos. R/.
Aleluya.
EVANGELIO
[Los
perritos, debajo de la mesa, comen las migajas que tiran los niños.]
Del santo Evangelio según
san Marcos 7, 24-30
En aquel tiempo, Jesús salió
de Genesaret y se fue a la región donde
se encuentra Tiro. Entró en una casa, pues no quería que nadie se
enterara de que estaba ahí, pero no pudo pasar inadvertido. Una mujer,
que tenía una niña poseída por un espíritu impuro, se enteró enseguida,
fue a buscarlo y se postró
a sus pies. Cuando aquella
mujer, una siria de Fenicia y pagana, le rogaba a Jesús que le sacara
el demonio a su hija, él le respondió: "Deja que coman primero los
hijos. No está bien quitarles el pan a los hijos para echárselo a
los perritos". La mujer le replicó: "Sí,
Entonces Jesús le contestó:
"Anda, vete; por eso que has dicho, el demonio ha salido ya de tu
hija". Al llegar a su casa, la mujer encontró a su hija recostada
en la cama, y ya el demonio había salido de ella. Palabra
del Señor.
REFLEXIÓN:
Una vez que ha dejado en claro el asunto de lo «puro» y de lo «impuro»,
Jesús se retira por un tiempo a tierra de paganos, a fin de poder
descansar y dedicarse así, más directa y explícitamente, a la formación
de sus discípulos. Es entonces cuando, con una finalidad bien precisa,
pone a prueba la fe de una pobre mujer extranjera, que viene a pedirle
con insistencia la liberación de su hija. Cuando la fe es fuerte y
tenaz como en este caso, no habrá límite alguno -ni étnico, ni social,
ni religioso- a la universal llamada a la salvación que, en Cristo,
a todos se nos ofrece.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Santifica, Señor, por tu
piedad, estos dones, y al recibir en oblación este sacrificio espiritual,
concédenos que podamos extender a todos tu amor. Por Jesucristo, nuestro Señor.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN 1 Cor 13, 13
Ahora tenemos estas tres
virtudes: la fe, la esperanza y el amor; pero el amor es la mayor
de las tres.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Te rogamos, Señor, que infundas
la gracia del Espíritu Santo en quienes has saciado con el mismo pan
del cielo; y que nos reanimes abundantemente con la dulzura de la
caridad perfecta. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Blanco / Memoria, SAN CIRILO, Monje y SAN METODIO, Obispo
MR p. 682 [698] / Lecc.
I p. 602
Estos dos hermanos evangelizaron
Moravia, Bohemia, Croacia y Bulgaria. Cirilo (+ 869) inventó un alfabeto
propio para esas gentes y luego murió en Roma. Metodio
(+ 885), consagrado obispo de Sirmio, regresó
a proseguir sus trabajos entre los eslavos. Juan Pablo II los proclamó
santos patrones de Europa para fomentar la unidad en la fe entre Europa
occidental y oriental.
ANTÍFONA DE ENTRADA
Estos son los hombres santos
que se hicieron amigos de Dios, insignes predicadores del Evangelio.
ORACIÓN COLECTA
Dios nuestro, que iluminaste
a los pueblos eslavos por medio de los santos hermanos Cirilo y Metodio, concede que comprendamos de corazón las palabras
de tu doctrina y que formemos un pueblo unido en la fe verdadera y
en su recta profesión. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que
vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo y es Dios por
los siglos de los siglos.
PRIMERA LECTURA
[Ustedes serán
como dioses, pues conocerán el bien y el mal.]
Del libro del Génesis 3, 1-8
De todos los animales salvajes
creados por el Señor Dios, la serpiente era el más astuto. Un día
le dijo a la mujer: "¿Es cierto que Dios les ha prohibido comer de
todos los árboles del jardín?"
La mujer le respondió a
la serpiente: "No. Sí podemos comer los frutos de los árboles del
jardín; pero de los frutos del árbol que está en el centro, Dios nos
ha prohibido comer y nos ha dicho que no lo toquemos, porque, de lo
contrario, moriremos".
La serpiente le dijo a la
mujer: "Eso de que ustedes van a morir no es cierto. Al contrario,
Dios sabe muy bien que, si comen de esos frutos, se les abrirán los
ojos y serán como dioses, pues conocerán el bien y el mal".
Entonces los frutos de aquel
árbol le parecieron a la mujer apetitosos, de hermoso aspecto y excelentes
para adquirir sabiduría. Tomó de los frutos y comió; y después le
dio a su marido, que estaba con ella, y él también comió. Al momento
se les abrieron los ojos a los dos y se dieron cuenta de que estaban
desnudos. Entrelazaron unas hojas de higuera y se cubrieron con ellas.
Oyeron luego los pasos del
Señor Dios, que se paseaba por el jardín a la hora de la brisa, y
se ocultaron de su vista entre los árboles del jardín". Palabra de Dios.
SALMO RESPONSORIAL del salmo 31
R/. Perdona, Señor, nuestros pecados.
Dichoso aquel que ha sido
absuelto de su culpa y su pecado. Dichoso aquel en el que Dios no
encuentra ni delito ni engaño. R/.
Ante el Señor reconocí mi
culpa, no oculté mi pecado. Te confesé, Señor, mi gran delito y tú
me has perdonado. R/.
Por eso, en el momento de
la angustia, que todo fiel te invoque, y no lo alcanzarán las grandes
aguas, aunque éstas se desborden. R/.
ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO Cfr. Hch 16, 14
R/. Aleluya, aleluya.
Abre, Señor, nuestros corazones,
para que comprendamos las palabras de tu Hijo. R/. Aleluya.
EVANGELIO
[Hace oír
a los sordos y hablar a los mudos.]
Del santo Evangelio según san Marcos 7, 31-37
En aquel tiempo, salió Jesús
de la región de Tiro y vino de nuevo, por Sidón, al mar de Galilea,
atravesando la región de Decápolis. Le llevaron
entonces a un hombre sordo y tartamudo, y le suplicaban que le impusiera
las manos. Él lo apartó a un lado de la gente, le metió los dedos
en los oídos y le tocó la lengua con saliva. Después, mirando al cielo,
suspiró y le dijo: "¡Effetá!" (que quiere decir "¡Ábrete!"). Al momento se le abrieron
los oídos, se le soltó la traba de la lengua y empezó a hablar sin
dificultad.
Él les mandó que no lo dijeran
a nadie; pero cuanto más se lo mandaba, ellos con más insistencia
lo proclamaban; y todos estaban asombrados y decían: "¡Qué bien lo
hace todo! Hace oír a los sordos y hablar a los mudos". Palabra
del Señor.
REFLEXIÓN:
Reportada curiosamente en el original arameo, la expresión «¡Effetá!» es una clara invitación de Jesús para que el sordomudo
se abra a la salvación que se le ofrece y logre así reintegrarse -lleno
de asombro- a su comunidad. Como algo totalmente insólito en su habitual
modo de proceder, Jesús prepara aquí a este pagano para su curación,
misma que viene acompañada de una serie de inusuales ceremonias. Éstas
sólo podrán ser interpretadas como simbólica anticipación de lo que
luego se realizará en la primitiva liturgia bautismal.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Mira, Señor, los dones que
presentamos a tu divina majestad en la conmemoración de los santos
Cirilo y Metodio, y concede que se conviertan
en el signo de la humanidad nueva reconciliada contigo en el amor. Por Jesucristo, nuestro Señor.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Cfr. Mc 16, 20
Salieron los discípulos
a predicar el Evangelio; y el Señor actuaba con ellos y confirmaba
la predicación con los milagros que hacían.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Dios nuestro, Padre de todos
los pueblos, que nos haces partícipes de un mismo pan y un mismo Espíritu
y herederos del banquete eterno, en esta fiesta de los santos Cirilo
y Metodio concédenos, benigno, que la muchedumbre de tus hijos,
perseverando en la misma fe, edifique, unánime, el reino de justicia
y de paz. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Verde / Blanco Feria o Misa de Santa María en sábado
MR p. 1140 [1189] / Lecc.
I p. 605
ANTÍFONA DE ENTRADA Cfr. Sal 44, 10
María, nuestra reina, está
de pie a la derecha de Cristo, enjoyada con oro de OfiR/.
ORACIÓN COLECTA
Padre celestial, que nos
has dado a santa María como madre y causa de nuestra alegría, concédenos
amarla y venerarla como verdaderos hijos suyos, y así poder recibir
los bienes de la fe que nos invitas a esperaR/.
Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que vive
y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo y es Dios por los
siglos de los siglos.
PRIMERA LECTURA
[El Señor
expulsó al hombre del jardín del Edén para que trabajara la tierra.]
Del libro del Génesis 3, 9-24
Después de que el hombre
y la mujer comieron del fruto del árbol prohibido, el Señor Dios llamó
al hombre y le preguntó: "¿Dónde estás?" Este le respondió: "Oí tus
pasos en el jardín; y tuve miedo, porque estoy desnudo, y me escondí".
Entonces le dijo Dios: "¿Y quién te ha dicho que estabas desnudo?
¿Has comido acaso del árbol del que te prohibí comer?" Respondió Adán:
"La mujer que me disté por compañera me ofreció del fruto del árbol
y comí". El Señor Dios dijo a la mujer: "¿Por qué has hecho esto?"
Repuso la mujer: "La serpiente me engañó y comí".
Entonces dijo el Señor Dios
a la serpiente: "Porque has hecho esto, serás maldita entre todos
los animales y entre todas las bestias salvajes. Te arrastrarás sobre
tu vientre y comerás polvo todos los días de tu vida. Pondré enemistad
entre ti y la mujer, entre tu descendencia y la suya; y su descendencia
te aplastarála cabeza, mientras tú tratarás
de morder su talón".
A la mujer le dijo: "Multiplicaré
las fatigas de tus embarazos y con dolores darás a luz a tus hijos.
Tus impulsos te llevarán hacia tu marido y él te dominará".
Al hombre le dijo: "Por
haberle hecho caso a tu mujer y por haber comido del árbol del que
te prohibí comer, maldito sea el suelo por tu culpa. Con fatiga sacarás
de él tus alimentos todos los días de tu vida. Te producirá cardos
y espinas y comerás de las hierbas del campo. Ganarás tu pan con el
sudor de tu frente, hasta que vuelvas a la tierra, porque de ella
te saqué: eres polvo y en polvo te convertirás".
El hombre le puso a su mujer
el nombre de "Eva", porque ella fue la madre de todos los vivientes.
El Señor Dios les hizo al hombre y a la mujer unas túnicas de pieles para
que se las pusieran. El Señor Dios dijo: "Aquí está el hombre ya casi
convertido en uno de nosotros, por el conocimiento del bien y del
mal. Que no vaya ahora a extender la mano para tomar de los frutos
del árbol de la vida, se los coma y viva para siempre".
Entonces, el Señor Dios
lo expulsó del jardín del Edén, para que trabajara el suelo, de donde
había sido hecho. Y expulsado el hombre, colocó al oriente del jardín
del Edén a unos querubines con unas espadas de fuego ardiente, para
impedir la entrada hacia el árbol de la vida. Palabra
de Dios.
SALMO RESPONSORIAL salmo 89
R/. Tú eres, Señor, nuestro refugio.
Desde antes que surgieran
las montañas, y la tierra y el mundo apareciesen, existes tú, Dios
mío, desde siempre y por siempre. R/.
Tú haces volver al polvo
a los humanos, diciendo a los mortales que retornen. Mil años para
ti son como un día, que ya pasó; como una breve noche. R/.
Nuestra vida es tan breve
como un sueño; semejante a la hierba, que despunta y florece en la
mañana y por la tarde se marchita y se seca. R/.
Enséñanos a ver lo que es
la vida y seremos sensatos. ¿Hasta cuándo, Señor,
vas a tener compasión de tus siervos? ¿Hasta cuándo? R/.
ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO Mt 4, 4
R/. Aleluya, aleluya.
No sólo de pan vive el hombre,
sino también de toda palabra que sale de la boca de Dios. R/.
Aleluya.
EVANGELIO
[La gente
comió hasta quedar satisfecha.]
Del santo Evangelio según san Marcos 8, 1-10
En aquellos días, vio Jesús
que lo seguía mucha gente y no tenían qué comeR/.
Entonces llamó a sus discípulos y les dijo: "Me
da lástima esta gente: ya llevan tres días conmigo y no tienen qué
comeR/. Si los mando a sus casas en ayunas, se van a
desmayar en el camino. Además, algunos han venido de lejos".
Sus discípulos le respondieron:
"¿Y dónde se puede conseguir pan, aquí en despoblado, para que coma
esta gente?" Él les preguntó: "¿Cuántos panes tienen?" Ellos le contestaron:
"Siete". Jesús mandó a la gente que se sentara en el suelo; tomó los
siete panes, pronunció la acción de gracias, los partió y se los fue
dando a sus discípulos, para que los distribuyeran. Y ellos los fueron
distribuyendo entre la gente.
Tenían, además, unos cuantos
pescados. Jesús los bendijo también y mandó que los distribuyeran.
La gente comió hasta quedar satisfecha, y todavía se recogieron siete
canastos de sobras. Eran unos cuatro mil. Jesús los despidió y luego
se embarcó con sus discípulos y llegó a la región de Dalmanuta.
Palabra del Señor.
REFLEXIÓN:
Este milagro de la segunda multiplicación de los panes se lleva a
cabo en tierra pagana. Jesús lo realiza en favor de quienes «vienen
de lejos», y pone de manifiesto su gran compasión por la multitud
hambrienta. Tal gesto del Señor integra -como espontánea y maravillosa
consecuencia- el generoso ofrecimiento del pan material y del Pan
espiritual. Desde siempre, la comunidad cristiana ha sabido compartir,
complementariamente, la mesa de la «Palabra» y la mesa de la «Eucaristía».
A ellas habrá de unirse la práctica de la caridad.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Dios nuestro, que el Espíritu
Santo, que cubrió con su sombra a la Virgen María, nos ayude a presentarte
estos dones y así se conviertan para nuestro bien en comida y bebida
de salvación. Por Jesucristo, nuestro Señor.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Cfr. Lc 1, 35
Dichosa eres, Virgen María,
porque el Espíritu Santo descenderá sobre ti, y el poder del Altísimo
te cubrirá con su sombra.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Dios y Padre nuestro, que
nos has alimentado con esta Eucaristía, haz que te sirvamos con una
conducta irreprochable, y unidos a la Virgen María, proclamemos tu
grandeza. Por Jesucristo, nuestro Señor.
VI DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO
Un camino
«nuevo» y «retador» ...
La palabra bíblica de este
domingo nos muestra el mejor camino para la dicha, para la conquista
de esa felicidad que todo hombre busca infatigablemente... Esta ruta,
que no es la habitual, sigue el itinerario de las «Bienaventuranzas»,
hoy proclamadas no según la versión de san Mateo sino de san Lucas.
Esta versión -más breve, más esencial e inmediatamente seguida de
unas desconcertantes «Malaventuranzas»- contrasta con las bendiciones
precedentes. Combinando las bendiciones y las maldiciones, al final
de cuentas, se mencionan ocho categorías de personas, emparejadas
de dos en dos: los pobres que suspiran por la liberación y los ricos
que ya tienen su consuelo, los que pasan hambre y los que están hartos,
los que lloran y los que ríen, los que son perseguidos y los aplaudidos
por todos.
Antes de Cristo, nadie había
hecho semejantes afirmaciones. Tan paradójicas son las Bienaventuranzas
que solamente las entiende quien las vive y las practica, como hizo
Jesús. Cristo mismo -su persona, su vida y su conducta- constituye
su mejor clave de interpretación: una clave de lectura universalmente
válida, para todo tiempo y lugar... Las Bienaventuranzas son un resumen
del Evangelio, la «Carta Magna», el programa de vida y el cuestionario
del examen ineludible que, finalmente, todos hemos de tratar de aprobar
exitosamente... Debido a su radical novedad hay quienes las acusan de
«utopía»: un mero ideal espiritualista, sublime pero inalcanzable.
Y, sin embargo, Jesús las
pronunció consciente de su significado. Él las propuso y las sigue
proponiendo a todo aquel que quiera recorrer su mismo camino, porque
son las actitudes básicas para ser su discípulo, para asimilar el
«espíritu» del Reino de Dios y para alcanzar la felicidad en plenitud.
Esta misma y desconcertante
inversión de valores será evocada con gallardía y bíblica esperanza
en el famoso «Cántico» de María, la Madre del Señor, al visitar a
su prima Isabel: "la predilección del Señor por el pobre y por lo
pobre" ...
Esta actitud se ve hoy reflejada
igualmente en la primera lectura-tomada del profeta Jeremías y a la
que hace eco el salmo responsorial- que contrapone dos clases de personas:
el que confía totalmente en Dios y el que se fía solamente de los
hombres, apartando su corazón del Señor. El primero es árbol fecundo, plantado junto al
río y el segundo un pobre cardo árido, perdido en la estepa.
MR p. 418
[416] / Lecc. I p. 280. Semana II del Salterio.
ANTÍFONA DE ENTRADA Sal
30, 3-4
Sírveme de defensa, Dios
mío, de roca y fortaleza salvadoras. Tú eres mi baluarte y mi refugio,
por tu nombre condúceme y guíame.
Se dice Gloria.
ORACIÓN COLECTA
Señor Dios, que prometiste
poner tu morada en los corazones rectos y sinceros, concédenos, por
tu gracia, vivir de tal manera que te dignes habitar en nosotros.
Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina contigo en
la unidad del Espíritu Santo y es Dios por los siglos de los siglos.
PRIMERA LECTURA
[Maldito el
que confía en el hombre. Bendito el que confía en el Señor]
Del libro del profeta Jeremías 17, 5-8
Esto dice el Señor: "Maldito
el hombre que confía en el hombre, que en él pone su fuerza y aparta
del Señor su corazón. Será como un cardo en la estepa, que no disfruta
del agua cuando llueve; vivirá en la aridez del desierto, en una tierra
salobre e inhabitable.
Bendito el hombre que confía
en el Señor y en él pone su esperanza. Será como un árbol plantado
junto al agua, que hunde en la corriente sus raíces; cuando llegue
el calor, no lo sentirá y sus hojas se conservarán siempre verdes;
en año de sequía no se marchitará ni dejará de dar frutos". Palabra
de Dios.
SALMO RESPONSORIAL del salmo 1
R/. Dichoso el hombre que confía en el Señor.
Dichoso aquel que no se
guía por mundanos criterios, que no anda en malos pasos ni se burla
del bueno, que ama la ley de Dios y se goza en cumplir sus mandamientos.
R/.
Es como un árbol plantado
junto al río, que da fruto a su tiempo y nunca se marchita. En todo
tendrá éxito. R/.
En cambio
los malvados serán como la paja barrida por el viento. Porque el Señor
protege el camino del justo y al malo sus caminos acaban por perderlo.
R/.
SEGUNDA LECTURA
[Si Cristo
no resucitó, es vana la fe de ustedes.]
De la primera carta del apóstol san Pablo a los corintios
15, 12. 16-20
Hermanos: Si hemos predicado
que Cristo resucitó de entre los muertos, ¿cómo es que algunos de
ustedes andan diciendo que los muertos no resucitan? Porque si los
muertos no resucitan, tampoco Cristo resucitó. Y si Cristo no resucitó,
es vana la fe de ustedes; y por tanto, aún
viven ustedes en pecado, y los que murieron en Cristo, perecieron.
Si nuestra esperanza en Cristo se redujera tan sólo a las cosas de
esta vida, seríamos los más infelices de todos los hombres. Pero no
es así, porque Cristo resucitó, y resucitó como la primicia de todos
los muertos. Palabra de Dios.
ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO Lc
6, 23
R/. Aleluya, aleluya.
Alégrense ese día y salten
de gozo, porque su recompensa será grande en el cielo, dice el Señor.
R/. Aleluya.
EVANGELIO
[Dichosos
los pobres. - ¡Ay de ustedes los ricos!]
Del santo Evangelio según san Lucas 6, 17. 20-26
En aquel tiempo, Jesús descendió
del monte con sus discípulos y sus apóstoles y se detuvo en un llano.
Allí se encontraba mucha gente, que había venido tanto de Judea y
de Jerusalén, como de la costa de Tiro y de Sidón.
Mirando entonces a sus discípulos,
Jesús les dijo: "Dichosos ustedes los pobres, porque de ustedes es
el Reino de Dios.
Dichosos ustedes los que
ahora tienen hambre, porque serán saciados. Dichosos ustedes los que
lloran ahora, porque al fin reirán.
Dichosos serán ustedes cuando
los hombres los aborrezcan y los expulsen de entre ellos, y cuando
los insulten y maldigan por causa del Hijo del hombre. Alégrense ese
día y salten de gozo, porque su recompensa será grande en el cielo.
Pues así trataron sus padres a los profetas.
Pero, ¡ay de ustedes, los
ricos, porque ya tienen ahora su consuelo! ¡Ay de ustedes, los que
se hartan ahora, porque después tendrán hambre! ¡Ay de ustedes, los
que ríen ahora, porque llorarán de pena! ¡Ay de ustedes, cuando todo
el mundo los alabe, porque de ese modo trataron sus padres a los falsos
profetas!" Palabra del Señor.
Se dice Credo.
ORACIÓN DE LOS FIELES:
Imploremos al Dios de misericordia
y pidámosle su ayuda para poder invocar su nombre con sentimientos
que le agraden:
Por
la paz de todo el mundo, por la prosperidad de las santas Iglesias
y por la unión de todos los hombres, roguemos al Señor.
Por
nuestros gobernantes, para que bajo su dirección tengamos una vida
feliz y pacífica, roguemos al Señor.
Por
la conservación de la naturaleza, por la abundancia de las cosechas
y por el progreso del mundo, roguemos al Señor.
Por
nuestros familiares y amigos -que han muerto en la esperanza de la
resurrección- para que Dios les conceda el reposo eterno, roguemos
al Señor.
Dios nuestro, que derribas
a los poderosos del trono y a los humildes los colmas de bienes, atiende
el clamor de los pobres y oprimidos -que se eleva a ti desde todas
las regiones del mundo- rompe el yugo de la violencia y del egoísmo,
y haz que seamos signos de una humanidad nueva reunida y unificada
en el amor. Por Jesucristo, nuestro Señor.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Que esta ofrenda, Señor,
nos purifique y nos renueve, y se convierta en causa de recompensa
eterna para quienes cumplimos tu voluntad. Por Jesucristo, nuestro
Señor.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Cfr. Sal 77, 29-30
El Señor colmó el deseo
de su pueblo; no lo defraudó. Comieron y quedaron satisfechos.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Saciados, Señor, por este
manjar celestial, te rogamos que nos hagas anhelar siempre este mismo
sustento por el cual verdaderamente vivimos. Por Jesucristo, nuestro
Señor.
Verde / Blanco Feria o LOS SIETE SANTOS
FUNDADORES DE LA ORDEN DE LOS SIERVOS DE LA VIRGEN MARÍA
MR pp. 683
y 926 [699 y 965] / Lecc. I p. 611
Hacia el año 1233 siete
comerciantes florentinos se retiraron al tranquilo monte Senario,
para llevar una vida fraternal de pobreza y penitencia, contemplando
la pasión del Señor bajo la protección de la santísima Virgen María.
La gente los llamó "Siervos de María" o "Servitas".
ANTÍFONA DE ENTRADA Cfr. Sal 15, 5
El Señor es la parte de
mi herencia y mi cáliz; tú, Señor, me devuelves mi heredad.
ORACIÓN COLECTA
Señor, infunde bondadoso
en nosotros el espíritu de piedad con el que estos santos fundadores
veneraron con tanto fervor a la Madre de Dios, y condujeron a tu pueblo
hacia ti. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina
contigo en la unidad del Espíritu Santo y es Dios por los siglos de
los siglos.
PRIMERA LECTURA
[Caín se lanzó
contra su hermano y lo mató.]
Del libro del Génesis 4, 1-15. 25
En aquel tiempo, Adán se
unió con Eva, su mujer; ella concibió y dio a luz a Caín, pues decía:
"Con el favor de Dios he engendrado un hijo". Después de algún tiempo
dio a luz al hermano de Caín, Abel. Abel fue pastor de ovejas, y Caín
labradoR/.
Sucedió en una ocasión,
que Caín presentó como ofrenda al Señor los productos de la tierra.
También Abel le hizo una ofrenda: sacrificó las primeras crías de
sus ovejas y quemó su grasa. Al Señor le agradaron las ofrendas de
Abel, pero no le agradaron las de Caín; por lo cual, Caín se enfureció
y andaba resentido. El Señor le dijo entonces a Caín: "¿Por qué te
enfureces tanto y andas resentido? Si hicieras el bien, te sentirías
feliz; pero si haces el mal, el pecado estará a tu puerta, acechándote
como fiera; pero tú debes dominarlo".
Un día Caín le dijo a su
hermano Abel: "Vamos al campo". Y cuando estaban en el campo, Caín
se lanzó contra su hermano y lo mató. Entonces el Señor le preguntó
a Caín: "¿Dónde está Abel, tu hermano?" Caín le respondió: "No lo
sé. ¿Acaso soy yo el guardián de mi hermano?" El Señor le dijo: "¿Qué
es lo que has hecho? ¿No oyes cómo la sangre de tu hermano está clamando
a mí desde la tierra? Por eso serás maldito y tendrás que vivir lejos
de la tierra que recibió de ti la sangre de tu hermano; y aunque cultives
la tierra, ella no volverá a darte frutos abundantes. Tú andarás por
el mundo errante y fugitivo".
Caín le contestó al Señor:
"Mi castigo es demasiado grande para soportarlo. Puesto que tú me
arrojas de esta tierra fértil, tendré que ocultarme de ti y andar
errante y fugitivo por el mundo, y cualquiera que me encuentre, me
matará". El Señor le dijo: "De ninguna manera. El que te mate a ti
será castigado siete veces". Y el Señor le puso una señal a Caín para
que, si alguien lo encontraba, no lo matara.
Adán se unió otra vez a
su mujer, y ella dio a luz un hijo, a quien llamó Set, pues decía:
"El Señor me ha dado otro hijo en lugar de Abel, asesinado por Caín".
Palabra de Dios.
SALMO RESPONSORIAL del salmo 49
R/. Te ofreceremos, Señor, sacrificios de alabanza.
Habla el Dios de los dioses,
el Señor, y convoca a cuantos viven en la tierra del oriente al poniente:
"No voy a reclamarte sacrificios, pues siempre están ante mí tus holocaustos.
R/.
¿Por qué citas mis preceptos
y hablas a toda hora de mi pacto, tú que detestas la obediencia y
echas en saco roto mis mandatos? R/.
Te pones a insultar a tu
hermano y deshonras al hijo de tu madre. Tú haces esto, ¿y yo tengo
que callarme? ¿Crees acaso que yo soy como tú? No, yo te reprenderé
y te echaré en cara tus pecados". R/.
ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO Jn 14, 6
R/. Aleluya, aleluya.
Yo soy el camino, la verdad
y la vida; nadie va al Padre, si no es por mí, dice el Señor. R/. Aleluya.
EVANGELIO
[¿Por qué
esta gente busca una señal?]
Del santo Evangelio según san Marcos 8, 11-13
En aquel tiempo, se acercaron
a Jesús los fariseos y se pusieron a discutir con él, y para ponerlo
a prueba, le pedían una señal del cielo. Jesús suspiró profundamente
y dijo: "¿Por qué esta gente busca una señal? Les aseguro que a esta
gente no se le dará ninguna señal".
Entonces los dejó, se embarcó
de nuevo y se fue a la otra orilla. Palabra del Señor.
REFLEXIÓN:
A los obstinados fariseos no parecen bastarles los que podríamos llamar
"milagros ordinarios". Es por eso que -«para ponerlo a prueba»- ellos
demandan «una señal del cielo», es decir, un prodigio operado por
Dios mismo. Frente a tal cerrazón, Jesús les advierte que, por supuesto,
el Señor no les concederá el milagro solicitado. Entonces, apesadumbrado,
Él se va en la barca, en busca de gente más humilde, más abierta y
más bien dispuesta.
La verdadera fe no sólo
va más allá de los «signos», sino que, incluso, está dispuesta a renunciar
a cualquier divina intervención, así sea muy impactante (Cfr. 1 Cor 1, 22-23).
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Dios misericordioso, que,
despojando a los siete santos fundadores de la orden de María del
hombre viejo, te dignaste formar en ellos un hombre nuevo conforme
a tu imagen, concédenos, propicio, que nosotros, igualmente renovados,
te ofrezcamos este sacrificio de reconciliación, agradable a tus ojos.
Por Jesucristo, nuestro Señor.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Cfr. Mt 19, 27-29
Yo les aseguro que ustedes
que han dejado todo para seguirme, recibirán cien veces más y heredarán
la vida eterna.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Por la eficacia de este
sacramento, te rogamos, Señor, que, a ejemplo de los siete santos
fundadores de la orden de los siervos de María, nos conduzcas siempre
por el camino de tu amor, y que la obra buena que empezaste en nosotros,
la perfecciones, hasta el día en que se manifieste Jesucristo. Él,
que vive y reina por los siglos de los siglos.
Verde Feria o Misa por la Iglesia Universal
"C"
MR p. 1041
[1085] / Lecc. I p. 616
ANTÍFONA DE ENTRADA Mt
18, 20
Donde dos o tres se reúnen
en mi nombre, ahí estoy yo en medio de ellos, dice el Señor.
ORACIÓN COLECTA
Te pedimos, Dios todopoderoso,
que tu Iglesia sea siempre un pueblo santo reunido en la unidad del
Padre y del Hijo y del Espíritu Santo, para que manifieste el misterio
de tu santidad y de tu unidad al mundo y lo lleve a la perfección
de tu amor. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que vive
y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo y es Dios por los
siglos de los siglos.
PRIMERA LECTURA
[Borraré de
la superficie de la tierra al hombre que he creado.]
Del libro del Génesis 6, 5-8; 7, 1-5. 10
En aquel tiempo, viendo
el Señor que en la tierra la maldad del hombre era muy grande y que
sus actitudes eran siempre perversas, se arrepintió de haber creado
al hombre, y lleno de profundo pesar, dijo: "Borraré de la superficie
de la tierra al hombre que he creado, y con el hombre, también a los
cuadrúpedos, reptiles y aves, pues estoy arrepentido de haberlos creado".
Pero Noé encontró gracia
ante el Señor. Así pues, el Señor le dijo a Noé: "Entra en el
arca con toda tu familia, pues tú eres el único hombre justo que he
encontrado en esta generación. De todos los animales puros toma siete
parejas, macho y hembra; de los no puros, una pareja, macho y hembra;
y lo mismo de las aves, siete parejas, macho y hembra, para que se
conserve su especie en la tierra. Pasados siete días, haré llover
sobre la tierra durante cuarenta días y cuarenta noches, y borraré
de la superficie de la tierra a todos los vivientes que he creado".
Noé hizo todo lo que le
mandó el Señor, y siete días después, cayó el diluvio sobre la tierra.
Palabra de Dios.
SALMO RESPONSORIAL del salmo 28
R/. Dios bendice a su pueblo con la paz.
Hijos de Dios, glorifiquen
al Señor, denle la gloria que merece. Postrados en su templo santo,
alabemos al Señor. R/.
La voz del Señor se deja
oír sobre las aguas torrenciales. La voz del Señor es poderosa, la
voz del Señor es imponente. R/.
El Dios de majestad hizo
sonar el trueno de su voz. El Señor se manifestó sobre las aguas desde
su trono eterno. R/.
ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO Jn 14, 23
R/. Aleluya, aleluya.
El que me ama cumplirá mi
palabra y mi Padre lo amará y haremos en él nuestra morada, dice el
Señor. R/. Aleluya.
EVANGELIO
[Cuídense
de la levadura de los fariseos y de la de Herodes.]
Del santo Evangelio según san Marcos 8, 14-21
En aquel tiempo, cuando
los discípulos iban con Jesús en la barca, se dieron cuenta de que
se les había olvidado llevar pan; sólo tenían uno. Jesús les hizo
esta advertencia: "Fíjense bien y cuídense de la levadura de los fariseos
y de la de Herodes".
Entonces ellos comentaban
entre sí: "Es que no tenemos panes".
Dándose cuenta de ello,
Jesús les dijo: "¿Por qué están comentando que no trajeron panes?
¿Todavía no entienden ni acaban de comprender? ¿Tan embotada está
su mente? ¿Para qué tienen ustedes ojos, si no ven, y oídos, si no
oyen? ¿No recuerdan cuántos canastos de sobras recogieron, cuando
repartí cinco panes entre cinco mil hombres?" Ellos le contestaron:
"Doce". Y añadió: "¿Y cuántos canastos de sobras recogieron cuando
repartí siete panes entre cuatro mil?" Le respondieron: "Siete". Entonces
él dijo: "¿Y todavía no acaban de comprender?" Palabra del Señor.
REFLEXIÓN:
Durante la travesía del lago, los discípulos malinterpretan la recomendación
de Jesús de guardarse «de la levadura de los fariseos y de la de Herodes».
Esto es, del peligro de verse atrapados en un "mesianismo" meramente
nacionalista. Si este fuera el caso, no harían más que imitar al antiguo
y endurecido Israel. El Maestro no se cansará de orientarlos hacia
intereses más espirituales. Evitar tal «levadura» - que en el pasaje
paralelo san Lucas identifica con la «hipocresía» (Lc
12, 1)- ha de venir, efectivamente, antes que la búsqueda del pan
puramente terreno y material (Cfr. Mt 6, 33).
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Señor Dios, al celebrar
el memorial del inmenso amor de tu Hijo, te suplicamos que el fruto
de su acción salvadora contribuya, por el ministerio de tu Iglesia,
a la salvación del mundo entero. Por Jesucristo, nuestro Señor.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Cfr. 1 Cor 10, 17
El pan es uno, y aunque
somos muchos, formamos un solo cuerpo, porque participamos de un mismo
pan y de un mismo cáliz.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Dios nuestro, que por este
admirable sacramento fortaleces y consuelas a la Iglesia, concede
a tu pueblo unirse más a Cristo, para que, a través de las tareas
temporales, vaya construyendo, en libertad, tu Reino eterno. Por Jesucristo,
nuestro Señor.
Verde / Blanco Feria o Misa de San José
MR p. 1146
[1197] / Lecc. I p. 620
ANTÍFONA DE ENTRADA Cfr. Lc 12, 42
Este es el siervo fiel y
prudente a quien el Señor puso al frente de su familia.
ORACIÓN COLECTA
Señor Dios, que en tu inefable
providencia te dignaste elegir a san José como esposo de la santísima
Madre de tu Hijo, concédenos que merezcamos tener como intercesor
en el cielo a quien veneramos como protector en la tierra. Por nuestro
Señor Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina contigo en la unidad del
Espíritu Santo y es Dios por los siglos de los siglos.
PRIMERA LECTURA
[Vio Noé que
la tierra estaba ya seca.]
Del libro del Génesis 8, 6-13. 20-22
Cuarenta días después de
que las aguas del diluvio habían ido bajando y ya se veían las cimas
de los montes, Noé abrió la ventana que había hecho en el arca y soltó
un cuervo. Este anduvo yendo y viniendo, hasta que se secó el agua
en la tierra.
Después soltó Noé una paloma,
para ver si ya se había secado el agua sobre la superficie de la tierra.
La paloma no encontró en dónde posarse y volvió al arca, porque aún
había agua sobre la superficie de la tierra. Noé estiró el brazo,
la tomó y la metió en el arca. Esperó otros siete días y volvió a
soltar la paloma, que regresó al atardecer con una hoja de olivo en
el pico. Noé comprendió que el agua sobre la tierra era ya muy poca.
Esperó otros siete días y soltó otra vez la paloma, la cual ya no
regresó.
El primer día del primer
mes del año seiscientos uno se secó el agua en la tierra. Noé levantó
la cubierta del arca y vio que la tierra estaba ya seca.
Entonces salió del arca
y construyó un altar al Señor; tomó animales y aves de toda especie
pura y los ofreció en holocausto sobre el altaR/.
Cuando el Señor aspiró la suave fragancia de
las ofrendas, se dijo: "No volveré a maldecir la tierra a causa del
hombre. Es cierto que el corazón humano se inclina al mal desde su
infancia, pero yo no volveré a exterminar a los vivientes, como acabo
de hacerlo. Mientras dure la tierra, no han de faltar siembra y cosecha,
frío y calor, verano e invierno, día y noche". Palabra
de Dios.
SALMO RESPONSORIAL del salmo 115
R/. Daré gracias al Señor toda mi vida.
¿Cómo le pagaré al Señor
todo el bien que me ha hecho? Levantaré el cáliz de salvación e invocaré
el nombre del Señor. R/.
A los ojos del Señor es
muy penoso que mueran sus amigos. De la muerte, Señor, me has librado,
a mí, tu esclavo e hijo de tu esclava. R/.
Cumpliré mis promesas al
Señor ante todo su pueblo, en medio de su templo santo, que está en
Jerusalén. R/.
ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO Cfr Ef
1, 17-18
R/. Aleluya, aleluya.
Que el Padre de nuestro
Señor Jesucristo ilumine nuestras mentes, para que podamos comprender
cuál es la esperanza que nos da su llamamiento. R/. Aleluya.
EVANGELIO
[El ciego
quedó curado y veía todo con claridad.]
Del santo Evangelio según san Marcos 8, 22-26
En aquel tiempo, Jesús y
sus discípulos llegaron a Betsaida y enseguida
le llevaron a Jesús un ciego y le pedían que lo tocara. Tomándolo
de la mano, Jesús lo sacó del pueblo, le puso saliva en los ojos,
le impuso las manos y le preguntó: "¿Ves algo?" El ciego, empezando
a ver, le dijo: "Veo a la gente, como si fueran árboles que caminan".
Jesús le volvió a imponer
las manos en los ojos y el hombre comenzó a ver perfectamente bien:
estaba curado y veía todo con claridad. Jesús lo mandó a su casa,
diciéndole: "Vete a tu casa, y si pasas por el pueblo, no se lo digas
a nadie". Palabra del Señor.
REFLEXIÓN:
El relato de la curación del ciego de Betsaida
-exclusivo de san Marcos- tiene varias semejanzas con el realizado
por Jesús en favor del sordomudo de la Decápolis
(Cfr. Mc 7, 31-37).
Pero en este único caso
la sanación es gradual y no instantánea. Solamente después de la segunda
imposición de manos, el que antes era ciego ve todo con claridad.
Finalmente, Jesús le recomienda el habitual silencio. En este gesto
tan peculiar las comunidades apostólicas descubrieron un rasgo «litúrgico-sacramental»,
reflejado luego en el progresivo itinerario de la iniciación cristiana
de los catecúmenos.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Al prepararnos a ofrecerte,
Padre santo, este sacrificio de alabanza, te suplicamos que para cumplir
la misión que nos has confiado nos ayude la intercesión de san José,
a quien concediste cuidar en la tierra, haciendo las veces de padre,
a tu Unigénito. Él, que vive y reina por los siglos de los siglos.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Mt 25, 21
Alégrate, siervo bueno y
fiel. Entra a compartir el gozo de tu Señor.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Renovados con este sacramento
que da vida, te rogamos, Señor, que nos concedas vivir para ti en
justicia y santidad, a ejemplo y por intercesión de san José, el varón
justo y obediente que contribuyó con sus servicios a la realización
de tus grandes misterios. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Verde Feria o Misa para pedir la caridad
MR p. 1097
[1143] / Lecc. I p. 624
ANTÍFONA DE ENTRADA Ez
36, 26-28
Dice el Señor: Arrancaré
de ustedes el corazón de piedra y les daré un corazón de carne, les
infundiré mi espíritu. Ustedes serán mi pueblo y yo seré su Dios.
ORACIÓN COLECTA
Inflama, Señor, nuestros
corazones con el Espíritu de tu amor, para que podamos pensar siempre
lo que es digno y agradable a tus ojos y amarte sinceramente en los
hermanos. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina
contigo en la unidad del Espíritu Santo y es Dios por los siglos de
los siglos.
PRIMERA LECTURA
[Pondré mi
arco iris en el cielo, como señal de mi alianza con la tierra.]
Del libro del Génesis 9, 1-13
En aquel tiempo, Dios bendijo
a Noé y a sus hijos, diciéndoles: "Crezcan y multiplíquense y llenen
la tierra. Todos los animales los temerán y los respetarán a ustedes;
las aves del cielo, los reptiles de la tierra, los peces del mar están
sujetos a ustedes.
Todo lo que vive y se mueve
les servirá a ustedes de alimento; se lo entrego a ustedes, lo mismo
que los vegetales. Pero no coman carne con sangre, pues en la sangre
está la vida. Por eso yo pediré cuentas de la sangre de ustedes, que
es su vida; se las pediré a cualquier animal; y al hombre también
le pediré cuentas de la vida de su hermano. Si alguien derrama la
sangre de un hombre, otro derramará la suya; porque Dios hizo al hombre
a su imagen. Ustedes crezcan y multiplíquense, extiéndanse por la
tierra y domínenla".
También dijo Dios a Noé
y a sus hijos: "Ahora establezco una alianza con ustedes y con sus
descendientes, con todos los animales que los acompañaron, aves, ganados
y fieras, con todos los que salieron del arca, con todo ser viviente
sobre la tierra. Esta es la alianza que establezco con ustedes: No
volveré a exterminar la vida con el diluvio, ni habrá otro diluvio
que destruya la tierra".
Y añadió: "Esta es la señal
de la alianza perpetua que yo establezco con ustedes y con todo ser
viviente que esté con ustedes: pondré mi arco iris en el cielo, como
señal de mi alianza con la tierra". Palabra
de Dios.
SALMO RESPONSORIAL del salmo 101
R/. El Señor ha mirado
a la tierra desde el cielo.
Cuando el Señor reedifique
a Sión y aparezca glorioso, cuando Oiga
el clamor del oprimido y no se muestre a sus plegarias sordo, entonces
al Señor temerán todos los pueblos, y su gloria verán los poderosos.
R/.
Esto se escribirá para el
futuro y alabará al Señor el pueblo nuevo, porque el Señor, desde
su altura santa, ha mirado a la tierra desde el cielo, para oír los
gemidos del cautivo y librar de la muerte al prisionero. R/.
Bajo tu protección, Señor,
habitarán los hijos de tus siervos y se establecerán sus descendientes.
Tu nombre en Sión alabarán por eso, cuando
en Jerusalén, a darte culto, se reúnan, Señor, todos los pueblos.
R/.
ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO Cfr. Jn 6, 63. 68
R/. Aleluya, aleluya.
Tus palabras, Señor, son
espíritu y vida. Tú tienes palabras de vida eterna. R/. Aleluya.
EVANGELIO
[Dijo
Pedro: "Tú eres el Mesías". Es necesario que el Hijo del hombre padezca
mucho.]
Del santo Evangelio según
san Marcos 8, 27-33
En aquel tiempo, Jesús y
sus discípulos se dirigieron a los poblados de Cesarea
de Filipo. Por el camino les hizo esta pregunta: "¿Quién dice la gente
que soy yo?" Ellos le contestaron: "Algunos dicen que eres Juan el
Bautista; otros, que Elías; y otros, que alguno de los profetas".
Entonces él les preguntó:
"Y ustedes, ¿quién dicen que soy yo?" Pedro le respondió: "Tú eres
el Mesías". Y él les ordenó que no se lo dijeran a nadie. Luego
se puso a explicarles que era necesario que el Hijo del hombre padeciera
mucho, que fuera rechazado por los ancianos, los sumos sacerdotes
y los escribas, que fuera entregado a la muerte y resucitara al tercer
día.
Todo esto lo dijo con entera
claridad. Entonces Pedro se lo llevó aparte y trataba de disuadirlo.
Jesús se volvió, y mirando a sus discípulos, reprendió a Pedro con
estas palabras: "¡Apártate de mí, Satanás! Porque tú no juzgas según
Dios, sino según los hombres". Palabra
del Señor.
REFLEXIÓN:
Con la profesión de fe de Pedro culmina la previa y gradual "auto-revelación"
que Jesús ha venido ofreciendo a los suyos. Y aquí, de inmediato,
se introduce el tema más amplio del «Mesías sufriente», con el consiguiente
escándalo que en él va implícito.
Este tema -de honda raigambre
profética (Cfr. Isaías capítulos
42 y 53)- sólo vendrá a aclararse a la luz de la pasión, muerte y
resurrección del Señor. La interrogante que Jesús planteó en su momento
a sus discípulos sigue abierta. Ella, hoy como ayer, sigue esperando
la adecuada y comprometida respuesta de nosotros los creyentes.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Santifica, Señor, por tu
piedad, estos dones, y al recibir en oblación este sacrificio espiritual,
concédenos que podamos extender a todos tu amor. Por Jesucristo, nuestro Señor.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN 1 Cor 13, 13
Ahora tenemos estas tres
virtudes: la fe, la esperanza y el amor; pero el amor es la mayor
de las tres.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Te rogamos, Señor, que infundas
la gracia del Espíritu Santo en quienes has saciado con el mismo pan
del cielo; y que nos reanimes abundantemente con la dulzura de la
caridad perfecta. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Verde/Blanco Feria o SAN PEDRO DAMIÁN,
Obispo y Doctor de la Iglesia
MR pp. 684
y 909 [700 y 948] / Lecc. I p. 628
Nació en Ravena (1007) y
vivió una vida de ermitaño en Fuente Avellana, antes de convertirse
en el colaborador de los Papas para promover la reforma en la Iglesia.
Fue cardenal-obispo de Ostia (1057), encargado de muchas legaciones
pontificias en Italia, Francia y Alemania, durante las cuales luchó
con energía para devolverle al clero su dignidad, y a la Iglesia su
libertad (+1072).
ANTÍFONA DE ENTRADA Cfr. Sir 15, 5
En medio de la Iglesia abrió
su boca, y el Señor lo llenó del espíritu de sabiduría e inteligencia,
y lo revistió de gloria.
ORACIÓN COLECTA
Concédenos, Dios todopoderoso,
seguir las enseñanzas y ejemplos del obispo san Pedro Damián, para
que, prefiriendo en todo a Cristo, estemos siempre entregados al servicio
de tu Iglesia, y así lleguemos al gozo de la luz eterna. Por nuestro
Señor Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina contigo en la unidad del
Espíritu Santo y es Dios por los siglos de los siglos.
PRIMERA LECTURA
[Se llamó
Babel, porque ahí confundió el Señor las lenguas de todos los hombres.]
Del libro del Génesis 11, 1-9
En aquel tiempo, toda la
tierra tenía una sola lengua y unas mismas palabras. Al emigrar los
hombres desde el oriente, encontraron una llanura en la región de
Sinaar y allí se establecieron.
Entonces se dijeron unos
a otros: "Vamos a fabricar ladrillos y a cocerlos". Utilizaron, pues,
ladrillos en vez de piedras, y asfalto en vez de mezcla. Luego dijeron:
"Construyamos una ciudad y una torre que llegue hasta el cielo, para
hacernos famosos, antes de dispersarnos por la tierra".
El Señor bajó a ver la ciudad
y la torre que los hombres estaban construyendo y se dijo: "Son un
solo pueblo y hablan una sola lengua. Si ya empezaron esta obra, en
adelante ningún proyecto les parecerá imposible. Vayamos, pues, y
confundamos su lengua, para que no se entiendan unos con otros".
Entonces el Señor los dispersó
por toda la tierra y dejaron de construir su ciudad; por eso, la ciudad
se llamó Babel, porque ahí confundió el Señor la lengua de todos los
hombres y desde ahí los dispersó por la superficie de la tierra. Palabra de Dios.
SALMO RESPONSORIAL del salmo 32
R/. Dichoso el pueblo escogido por Dios.
Frustra el Señor los planes
de los pueblos y hace que se malogren sus designios. Los proyectos
del Señor duran por siempre; los planes de su amor, todos los siglos.
Feliz la nación cuyo Dios es el Señor, dichoso el pueblo que escogió
por suyo. R/.
Desde el cielo el Señor,
atentamente, mira a todos los hombres; desde el lugar de su morada
observa a todos los que habitan en el orbe. El formó el corazón de
cada uno y entiende sus acciones. R/.
ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO Jn 15, 15
R/. Aleluya, aleluya.
A ustedes los llamo amigos,
dice el Señor, porque les he dado a conocer todo lo que le he oído
a mi Padre. R/.
Aleluya.
EVANGELIO
[El que pierda
su vida por mí y por el Evangelio, la salvará.]
Del santo Evangelio según san Marcos 8, 34-9, 1
En aquel tiempo, Jesús llamó
a la multitud y a sus discípulos y les dijo: "El que quiera venir
conmigo, que renuncie a sí mismo, que cargue con su cruz y que me
siga. Pues el que quiera salvar su vida, la perderá; pero el que pierda
su vida por mí y por el Evangelio, la salvará.
¿De qué le sirve a uno ganar
el mundo entero, si pierde su vida? ¿Y qué podrá dar uno a cambio
para recobrarla? Si alguien se avergüenza de mí y de mis palabras
ante esta gente, idólatra y pecadora, también el Hijo del hombre se
avergonzará de él, cuando venga con la gloria de su Padre, entre los
santos ángeles".
Y añadió: "Yo les aseguro
que algunos de los aquí presentes no morirán sin haber visto primero
que el Reino de Dios ha llegado ya con todo su poder". Palabra del Señor.
REFLEXIÓN:
Jesús acaba de anunciar el destino del «Mesías doliente» y pasa ahora
a delinear más explícitamente el camino que ha de seguir quien quiera
ser, de verdad, su discípulo. Este esforzado camino pasa necesariamente
a través de la cruz, de la renuncia y de la muerte. No hay otra manera
de aspirar a alcanzar una felicidad plena. Este principio, por cierto,
no se basa en un razonamiento abstracto, puramente teórico, sino en
el destino concreto experimentado por el mismo Jesús. Sólo Él -con
su forma de vivir- ha de ser la definitiva norma del cristiano.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Que te agrade, Dios nuestro,
el sacrificio que alegres te presentamos en la fiesta de san Pedro
Damián, por cuyas enseñanzas te alabamos y nos entregamos enteramente
a ti. Por Jesucristo, nuestro Señor.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Cfr. Lc 12, 42
Éste es el siervo fiel y
prudente, a quien el Señor puso al frente de su familia, para darles
a su tiempo la ración de trigo.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
A quienes alimentas con
Cristo, pan de vida, instrúyenos, Señor, por Cristo, verdadero maestro,
para que, en la festividad de san Pedro Damián, aprendamos tu verdad
y la llevemos a la práctica en la caridad. Por Jesucristo, nuestro
Señor.
Blanco Fiesta, CATEDRA DE SAN PEDRO, APÓSTOL
MR p. 684 [700] / Lecc.
I p. 1000
La cátedra (o sede) de un
obispo se levanta en la catedral y es la señal de su autoridad de
maestro, sacerdote y pastoR/. Esta cátedra de san Pedro nos recuerda la misión
confiada por Cristo al apóstol san Pedro. Pedro es la garantía de
la fe de sus hermanos. Pedro, por su fe, es la roca sobre la cual
el Señor ha construido su Iglesia.
ANTÍFONA DE ENTRADA Lc
22, 32
Dijo el Señor a Simón Pedro:
Yo he rogado por ti para que tu fe no desfallezca y tú, una vez convertido,
confirma a tus hermanos.
Se dice Gloria
ORACIÓN COLECTA
Te rogamos, Dios todopoderoso,
que no permitas que seamos sacudidos por perturbación alguna, ya que
nos has edificado sobre la roca de la confesión apostólica. Por nuestro
Señor Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina contigo en la unidad del
Espíritu Santo y es Dios por los siglos de los siglos.
PRIMERA LECTURA
[Me dirijo
a ustedes como pastor y testigo de los sufrimientos de Cristo.]
De la primera carta del apóstol san Pedro 5, 1-4
Hermanos: Me dirijo ahora
a los pastores de las comunidades de ustedes, yo, que también soy
pastor como ellos y además he gloria que se va a manifestaR/.
Apacienten el rebaño que
Dios les ha confiado y cuiden de él no como obligados por la fuerza,
sino de buena gana, como Dios quiere; no por ambición de dinero, sino
con entrega generosa; no como si ustedes fueran los dueños de las
comunidades que se les han confiado, sino dando buen ejemplo. Y cuando
aparezca el Pastor supremo, recibirán el premio inmortal de la gloria.
Palabra de Dios.
SALMO RESPONSORIAL del salmo 22
R/. El Señor es mi pastor, nada me faltará.
El Señor es mi pastor, nada
me falta; en verdes praderas me hace reposar y hacia fuentes tranquilas
me conduce para reparar mis fuerzas. R/.
Por ser un Dios fiel a sus
promesas, me guía por el sendero recto; así, aunque camine por cañadas
oscuras, nada temo, porque tú estás conmigo. Tu vara y tu cayado me
dan seguridad. R/.
Tú mismo me preparas la
mesa, a despecho de mis adversarios; me unges la cabeza con perfume
y llenas mi copa hasta los bordes. R/.
Tu bondad y tu misericordia
me acompañarán todos los días de mi vida; y viviré en la casa del
Señor por años sin término. R/.
ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO Mt 16, 18
R/. Aleluya, aleluya.
Tú eres Pedro y sobre esta
piedra edificaré mi Iglesia, y los poderes del infierno no prevalecerán
sobre ella, dice el Señor. R/. Aleluya.
EVANGELIO
[Tú eres Pedro
y yo te daré las llaves del Reino de los cielos.]
Del santo Evangelio según san Mateo 16, 13-19
En aquel tiempo, cuando
llegó Jesús a la región de Cesarea de Filipo,
hizo esta pregunta a sus discípulos: "¿Quién dice la gente que es
el Hijo del hombre?" Ellos le respondieron: "Unos dicen que eres Juan
el Bautista; otros, que Elías; otros, que Jeremías o alguno de los
profetas". Luego les preguntó: "Y ustedes, ¿quién dicen que soy yo?"
Simón Pedro tomó la palabra y le dijo: "Tú eres el Mesías, el Hijo
de Dios vivo". Jesús le dijo entonces: "¡Dichoso tú, Simón, hijo de Juan, porque esto no te lo ha revelado ningún hombre,
sino mi Padre que está en los cielos! Y yo te digo a ti que
tú eres Pedro y sobre esta piedra edificaré mi Iglesia. Los poderes
del infierno no prevalecerán sobre ella. Yo te daré las llaves del
Reino de los cielos; todo lo que ates en la tierra quedará atado en
el cielo, y todo lo que desates en la tierra quedará desatado en el
cielo". Palabra del Señor.
REFLEXIÓN:
La liturgia latina celebra hoy la fiesta de la Cátedra de San Pedro.
Se trata de una tradición muy antigua, atestiguada en Roma desde el
siglo IV, con la que se da gracias a Dios por la misión encomendada
al apóstol San Pedro y a sus sucesores.
La "cátedra", literalmente,
es la sede fija del obispo, puesta en la iglesia madre de una diócesis,
que por eso se llama "catedral", y es el símbolo de la autoridad del
obispo, y en particular de su "magisterio", es decir, de la enseñanza
evangélica que, en cuanto sucesor de los Apóstoles, está llamado a
conservar y transmitir a la comunidad cristiana... Elegido por Cristo
como "roca" sobre la cual edificar la Iglesia (Cfr.
Mt 16, 18), Pedro comenzó su ministerio en Jerusalén. Sucesivamente,
la sede de Pedro fue Antioquía, ciudad, evangelizada por San Bernabé
y San Pablo, donde «por primera vez, los discípulos recibieron el
nombre de cristianos» (Hch 11, 26). Desde
allí la Providencia llevó a Pedro a Roma -capital del imperio-, donde
concluyó con el martirio su vida al servicio del Evangelio. Por eso,
la sede de Roma, que había recibido el mayor honor, recogió también
el oficio encomendado por Cristo a Pedro de estar al servicio de todas
las Iglesias particulares para la edificación y la unidad de todo
el pueblo de Dios.
[Sintetizado de: Benedicto
XVI, Audiencia, 22-II-2006].
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Acepta, Señor, con bondad
las oraciones y ofrendas de tu Iglesia, para que alcance la vida eterna,
guiada por el apóstol Pedro, cuyo magisterio la mantiene en la integridad
de la fe. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Prefacio I de los Apóstoles,
p. 531 [532].
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Cfr. Mt 16, 16. 18
Dijo Pedro a Jesús: Tú eres
el Mesías, el Hijo de Dios vivo. Jesús le respondió: Tú eres Pedro,
y sobre esta piedra edificaré mi Iglesia.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Dios nuestro, que al celebrar la fiesta de san Pedro, apóstol, nos alimentaste
con la comunión del Cuerpo y la Sangre de Cristo, concédenos que este
intercambio redentor sea para nosotros sacramento de unidad y de paz.
Por Jesucristo, nuestro Señor.
Puede utilizarse la fórmula
de bendición solemne, p. 602 [610].
VII DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO
Misericordiosos «como
el Padre» ... Ángelus, 18-II-2007
El evangelio de este domingo
contiene una de las expresiones más típicas y fuertes de la predicación
de Jesús: «Amen a sus enemigos» ... Tal expresión está tomada del
evangelio de san Lucas, pero se encuentra también en el de san Mateo
(Mt 5, 44), en el contexto del discurso programático que comienza
con las famosas «Bienaventuranzas» ...
Jesús lo pronunció en Galilea,
al inicio de su vida pública. Es este casi un «manifiesto» presentado
a todos, sobre el cual pide la adhesión de sus discípulos, proponiéndoles
en términos radicales su «modelo de vida» ... Pero, ¿cuál es el
sentido de esas palabras?
¿Por qué Jesús pide amar a los propios enemigos, o sea, un amor que
excede la capacidad humana?
En realidad, la propuesta
de Cristo es realista, porque tiene en cuenta que en el mundo hay
demasiada violencia, demasiada injusticia y, por tanto, sólo se puede
superar esta situación contraponiendo un plus de amor y de bondad.
Este "plus" viene de Dios: es su misericordia, que se ha hecho carne
en Jesús y es la única que puede desequilibrar el mundo del mal hacia
el bien, a partir del pequeño y decisivo mundo que es el corazón del
hombre...
Con razón, esta página evangélica
se considera la «Carta Magna» de la no violencia cristiana, que no
consiste en rendirse ante el mal -según una falsa interpretación del
«presentar la otra mejilla» (Cfr.
Lc 6, 29)- sino en responder al mal con el bien (Cfr. Rm 12, 17-21), rompiendo
de este modo la cadena de la injusticia y del odio con las armas del
amor y de la verdad.
El amor a los enemigos constituye
el núcleo de la "revolución cristiana", un amor que en definitiva
no se apoya en los recursos humanos, sino que es don de Dios que se
obtiene confiando únicamente y sin reservas en su bondad misericordiosa...
Esta es la novedad del Evangelio, que cambia el mundo sin hacer ruido.
Este es el heroísmo de los
«pequeños», que creen en el amor de Dios y lo difunden incluso a costa
de su vida... Pidamos a la Virgen María -dócil discípula del Redentor-
que nos ayude a dejarnos conquistar sin reservas por ese amor, a aprender
a amar como Él nos ha amado, para ser misericordiosos como es misericordioso
nuestro Padre que está en los cielos (Cfr.
Lc 6, 36).
P.P. Benedicto XVI
MR p. 419 [417] / Lecc. I p. 283. Semana III del Salterio.
ANTÍFONA DE ENTRADA Sal 12, 6
Confío,
Señor, en tu misericordia. Se alegra mi corazón con tu auxilio; cantaré
al Señor por el bien que me ha hecho.
Se
dice Gloria.
ORACIÓN COLECTA
Concédenos,
Dios todopoderoso, que la constante meditación de tus misterios nos
impulse a decir y hacer siempre lo que sea de tu agrado. Por nuestro
Señor Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina contigo en la unidad del
Espíritu Santo y es Dios por los siglos de los siglos.
PRIMERA LECTURA
[David
no quiso atentar contra el ungido del Señor. ]
Del
primer libro de Samuel 26, 2. 7-9. 12-13. 22-23
En
aquellos días, Saúl se puso en camino con tres mil soldados israelitas,
bajó al desierto de Zif en persecución de
David y acampó en Jakilá.
David
y Abisay fueron de noche al campamento enemigo
y encontraron a Saúl durmiendo entre los carros; su lanza estaba clavada
en tierra, junto a su cabecera, y en torno a él dormían Abner y su
ejército. Abisay dijo entonces a David:
"Dios te está poniendo al enemigo al alcance de tu mano. Deja que
lo clave ahora en tierra con un solo golpe de su misma lanza. No hará
falta repetirlo". Pero David replicó: "No lo mates. ¿Quién puede atentar
contra el ungido del Señor y quedar sin pecado?"
Entonces
cogió David la lanza y el jarro de agua de la cabecera de Saúl y se
marchó con Abisay. Nadie los vio, nadie se enteró y nadie despertó; todos
siguieron durmiendo, porque el Señor les había enviado un sueño profundo.
David
cruzó de nuevo el valle y se detuvo en lo alto del monte, a gran distancia
del campamento de Saúl. Desde ahí gritó: "Rey Saúl, aquí está tu lanza,
manda a alguno de tus criados a recogerla. El Señor le dará a cada
uno según su justicia y su lealtad, pues él te puso hoy en mis manos,
pero yo no quise atentar contra el ungido del Señor". Palabra
de Dios.
SALMO RESPONSORIAL del salmo 102
R/. El Señor es compasivo y misericordioso.
Bendice
al Señor, alma mía, que todo mi ser bendiga su santo nombre. Bendice
al Señor, alma mía, y no te olvides de sus beneficios. R/.
El
Señor perdona tus pecados y cura tus enfermedades; él rescata tu vida
del sepulcro y te colma de amor y de ternura. R/.
El
Señor es compasivo y misericordioso, lento para enojarse y generoso
para perdonaR/. No nos trata como merecen nuestras culpas, ni
nos paga según nuestros pecados. R/.
Como
dista el oriente del ocaso, así aleja de nosotros nuestros delitos;
como un padre es compasivo con sus hijos, así es compasivo el Señor
con quien lo ama. R/.
SEGUNDA LECTURA
[Fuimos semejantes al hombre terreno y seremos semejantes al hombre
celestial.]
De la primera carta del apóstol san
Pablo a los corintios 15, 45-49
Hermanos:
La escritura dice que el primer hombre, Adán, fue un ser que tuvo
vida; el último Adán es Espíritu que da la vida.
Sin
embargo, no existe primero lo vivificado por el Espíritu, sino lo
puramente humano; lo vivificado por el Espíritu viene después.
El
primer hombre, hecho de tierra, es terreno; el segundo viene del cielo.
Como fue el hombre terreno, así son los hombres terrenos; como es
el hombre celestial, así serán los celestiales.
Y
del mismo modo que fuimos semejantes al hombre terreno, seremos también
semejantes al hombre celestial. Palabra de Dios.
ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO Jn 13, 34
R/. Aleluya, aleluya.
Les
doy un mandamiento nuevo, dice el Señor, que se amen los unos a los
otros, como yo los he amado. R/. Aleluya.
EVANGELIO
[Sean
misericordiosos, como su Padre es misericordioso.]
Del
santo Evangelio según san Lucas 6, 27-38
En
aquel tiempo, Jesús dijo a sus discípulos: "Amen a sus enemigos, hagan
el bien a los que los aborrecen, bendigan a quienes los maldicen y
oren por quienes los difaman. Al que te golpee en una mejilla, preséntale
la otra; al que te quite el manto, déjalo llevarse también la túnica.
Al que te pida, dale; y al que se lleve lo tuyo, no se lo reclames.
Traten
a los demás como quieran que los traten a ustedes; porque si aman
sólo a los que los aman, ¿qué hacen de extraordinario?
También
los pecadores aman a quienes los aman. Si hacen el bien sólo a los
que les hacen el bien, ¿qué tiene de extraordinario? Lo mismo hacen
los pecadores. Si prestan solamente cuando esperan cobrar, ¿qué hacen
de extraordinario? También los pecadores prestan a otros pecadores,
con la intención de cobrárselo después.
Ustedes,
en cambio, amen a sus enemigos, hagan el bien y presten sin esperar
recompensa. Así tendrán un gran premio y serán hijos del Altísimo,
porque él es bueno hasta con los malos y los ingratos. Sean misericordiosos,
como su Padre es misericordioso.
No
juzguen y no serán juzgados; no condenen y no serán condenados; perdonen
y serán perdonados. Den y se les dará: recibirán una medida buena,
bien sacudida, apretada y rebosante en los pliegues de su túnica.
Porque con la misma medida con que midan, serán medidos". Palabra
del Señor.
Se
dice Credo.
ORACIÓN DE LOS FIELES:
Invoquemos
a Dios todopoderoso con una oración tan pura y humilde, que merezca
obtener lo que pedimos:
Por la santa Iglesia, extendida de Oriente a Occidente: para que el
Señor la mantenga firme y confiada en medio de las contrariedades
y tentaciones del mundo, roguemos al Señor.
Por
los que tienen autoridad en el mundo, para que bajo su gobierno podamos
vivir en paz y concordia glorificando a Cristo,
nuestra esperanza, roguemos al Señor.
Por
los que nos desprecian a causa de nuestra fe y por los que persiguen
a la Iglesia: para que el Señor les conceda encontrar la verdad, roguemos
al Señor.
Por
los que estamos aquí reunidos en el nombre del Señor, para que Dios
nos conceda perseverar en la fe y nos reúna un día a todos en su reino,
roguemos al Señor.
Padre
clementísimo, que en Cristo nos has revelado
tu amor gratuito y universal, danos un corazón nuevo, para que seamos
capaces de amar a nuestros enemigos y de orar por los que nos injurian,
tal como nos lo mandó tu Hijo, que vive y reina por los siglos de
los siglos.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Al
celebrar con la debida reverencia tus misterios, te rogamos, Señor,
que los dones ofrecidos en honor de tu gloria nos sirvan para la salvación.
Por Jesucristo, nuestro Señor.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN
Sal 9, 2-3
Proclamaré
todas tus maravillas; me alegraré y exultaré contigo y entonaré salmos
a tu nombre, Dios Altísimo.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Concédenos,
Dios todopoderoso, que alcancemos aquel fruto celestial, cuyo adelanto
acabamos de recibir mediante estos sacramentos. Por Jesucristo, nuestro
Señor.
Verde Feria o Misa por
los familiares y amigos
MR p. 1098 [1144] / Lecc. I p. 636
ANTÍFONA DE ENTRADA Cfr. Sal 121,
6. 8
Digan
de todo corazón: Jerusalén, que haya paz entre aquellos que te aman.
Por mis hermanos y compañeros voy a decir: la paz contigo.
ORACIÓN COLECTA
Señor
Dios, que, por gracia del Espíritu Santo, infundiste en los corazones
de tus fieles los dones de tu amor, concede a tus siervos, por quienes
imploramos tu clemencia, la salud de cuerpo y alma, para que te amen
con todas sus fuerzas y cumplan con amor lo que es de tu agrado. Por
nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina contigo en la
unidad del Espíritu Santo y es Dios por los siglos de los siglos.
PRIMERA LECTURA
[Antes que cualquier otra cosa fue creada la sabiduría.]
Del libro del Sirácide
(Eclesiástico) 1, 1-10
Toda
sabiduría proviene del Señor y está con él eternamente. ¿Quién puede
contar las arenas de la playa, las gotas de la lluvia o los días de
los siglos? ¿Quién puede explorar la altura del cielo, la extensión
de la tierra y la profundidad de los abismos?
Antes
que cualquier otra cosa fue creada la sabiduría; y la luz de la inteligencia,
desde la eternidad. ¿A quién se le ha revelado la fuente de la sabiduría?
¿Quién ha conocido sus recursos inagotables? Uno solo es sabio, temible
en extremo: el que está sentado en su trono, el Señor.
El
creó la sabiduría, la contempló y la midió; la ha derramado sobre
todas sus obras y sobre todos los hombres, según su generosidad; la
ha derrochado entre aquellos que lo aman. Palabra
de Dios.
SALMO RESPONSORIAL del salmo 92
R/. El Señor es un rey magnífico.
Tú
eres, Señor, el rey de todos los reyes. Estás revestido de poder y
majestad. Tú mantienes el orbe y no vacila. Eres eterno, y para siempre
está firme tu trono. R/.
Muy
dignas de confianza son tus leyes y desde hoy y para siempre, Señor,
la santidad adorna tu templo. R/.
ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO 2 Tim 1, 10
R/. Aleluya, aleluya.
Jesucristo,
nuestro salvador, ha vencido la muerte y ha hecho resplandecer la
vida por medio del Evangelio. R/. Aleluya.
EVANGELIO
[Creo, Señor, pero dame tú la fe que me falta.]
Del santo Evangelio según san Marcos
9, 14-29
En
aquel tiempo, cuando Jesús bajó del monte y llegó al sitio donde estaban
sus discípulos, vio que mucha gente los rodeaba y que algunos escribas
discutían con ellos. Cuando la gente vio a Jesús, se impresionó mucho
y corrió a saludarlo. Él les preguntó: "¿De qué están discutiendo?"
De entre la gente, uno le contestó: "Maestro, te he traído a mi hijo,
que tiene un espíritu que no lo deja hablar; cada vez que se apodera
de él, lo tira al suelo y el muchacho echa espumarajos, rechina los
dientes y se queda tieso. Les he pedido a tus discípulos que lo expulsen,
pero no han podido".
Jesús
les contestó: "¡Gente incrédula! ¿Hasta cuándo tendré que estar con
ustedes? ¿Hasta cuándo tendré que soportarlos? Tráiganme al muchacho".
Y se lo trajeron. En cuanto el espíritu vio a Jesús, se puso a retorcer
al muchacho; lo derribó por tierra y lo revolcó, haciéndolo echar
espumarajos. Jesús le preguntó al padre: "¿Cuánto tiempo hace que
le pasa esto?" Contestó el padre: "Desde pequeño. Y muchas veces lo
ha arrojado al fuego y al agua para acabar con él. Por eso, si algo
puedes, ten compasión de nosotros y ayúdanos".
Jesús
le replicó: "¿Qué quiere decir eso de 'si puedes'? Todo es posible
para el que tiene fe". Entonces el padre del muchacho exclamó entre
lágrimas: "Creo, Señor; pero dame tú la fe que me falta". Jesús, al
ver que la gente acudía corriendo, reprendió al espíritu inmundo,
diciéndole: "Espíritu mudo y sordo, yo te lo mando: Sal de él y no
vuelvas a entrar en él". Entre gritos y convulsiones violentas salió
el espíritu. El muchacho se quedó como muerto, de modo que la mayoría
decía que estaba muerto. Pero Jesús lo tomó de la mano, lo levantó
y el muchacho se puso de pie.
Al
entrar en una casa con sus discípulos, éstos le preguntaron a Jesús
en privado: "¿Por qué nosotros no pudimos expulsarlo?" Él les respondió:
"Esta clase de demonios no sale sino a fuerza de oración y de ayuno".
Palabra del Señor.
REFLEXIÓN: Los aún inmaduros discípulos no pudieron sanar en primera
instancia a un muchacho epiléptico, popularmente considerado un "endemoniado".
Es entonces cuando interviene Jesús reprochándoles su falta de confianza
en el poder de Dios. Sólo hasta que su padre afirma sin vacilaciones:
«Creo, Señor; pero dame tú la fe que me falta», se realiza
el
milagro. Esta fe -expresada normalmente en sencilla y espontánea oración-
es capaz de obrar maravillas. Y así su poder transformador llegará
hasta nosotros a través de la eficaz «sacramentalidad»
de la Iglesia.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Apiádate,
Señor, de tus siervos, por quienes ofrecemos este sacrificio de alabanza
a tu majestad, para que, por efecto de estos santos misterios, obtengan
la gracia de tu bendición celestial y alcancen la gloria de la felicidad
eterna. Por Jesucristo, nuestro Señor.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN
Mt 12, 50
Todo
el que cumple la voluntad de mi Padre, que está en los cielos, ése
es mi hermano, mi hermana y mi madre.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Al
recibir este divino sacramento, te rogamos, Señor, que
a tus siervos, a quienes les concediste que nos amen, les des el perdón
de sus pecados, tu consuelo en la vida y tu constante protección,
para que, sirviéndote todos con un mismo corazón, podamos gozar juntos
de la visión de tu rostro. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Verde / Blanco / Feria
o BEATO SEBASTIAN DE APARICIO
MR p. 686 y 926 [702 y 965] / Lecc. I
p. 640
Nació
en Galicia en 1502. En 1533 vino a la Nueva España y se dedicó a la
agricultura. Posteriormente trabajó en el acarreo de mercancías. Con
el dinero que había ganado se volvió a dedicar a la agricultura. A
los 70 años de edad cedió todos sus bienes a unas religiosas. Se hizo
religioso franciscano y durante dos años pidió limosna para su convento.
Sus restos se veneran en el templo de San Francisco, Puebla.
ANTÍFONA DE ENTRADA Cfr. Sal 15, 5
El
Señor es la parte de mi herencia y mi cáliz; tú, Señor, me devuelves
mi heredad.
ORACIÓN COLECTA
Dios
nuestro, que quisiste dejarnos en el beato Sebastián de
PRIMERA LECTURA
[Prepárate
para la prueba.]
Del
libro del Sirácide (Eclesiástico) 2, 1-13
Hijo
mío, si te propones servir al Señor, prepárate para la
Confíate
al Señor y él cuidará de ti; espera en él y te allanará el
Miren
a sus antepasados y comprenderán. ¿Quién confió en el
SALMO
RESPONSORIAL del salmo 36
R/. Pon tu vida en
las manos del Señor.
Pon
tu esperanza en Dios, practica el bien y vivirás tranquilo
Cuida
el Señor la vida de los buenos y su herencia perdura;
Apártate
del mal, practica el bien y tendrás una casa eternamente;
La
salvación del justo es el Señor; en la tribulación él es su
ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO Gal 6, 14
R/. Aleluya, aleluya.
No
permita Dios que yo me gloríe en algo que no sea la cruz
EVANGELIO
[El
Hijo del hombre va a ser entregado. Si alguno quiere ser el
Del
santo Evangelio según san Marcos 9, 30-37
En
aquel tiempo, Jesús y sus discípulos atravesaban Galilea,
Llegaron
a Cafarnaúm, y una vez en casa, les preguntó: "¿De
Después,
tomando a un niño, lo puso en medio de ellos, lo
REFLEXIÓN: Con el segundo anuncio de la pasión
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Dios
misericordioso, que, despojando al beato Sebastián de
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN
Cfr. Mt 19, 27-29
Yo
les aseguro que ustedes que han dejado todo para seguirme,
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Por
la eficacia de este sacramento, te rogamos, Señor, que, a
Verde Feria o Misa por
los enfermos
MR p. 1101 [1148] / Lecc. I p. 645
ANTÍFONA DE ENTRADA Sal 6, 3-4
Te
piedad de mí, Señor, porque desfallezco; sáname, Señor,
ORACIÓN COLECTA
Señor
Dios, que quisiste que tu Unigénito cargara con nuestros
PRIMERA LECTURA
[El
Señor ama a aquellos que aman la sabiduría.]
Del
libro del Sirácide (Eclesiástico)4, 12-22
La
sabiduría instruye a sus hijos y cuida de aquellos que la
Los
que sirven a la sabiduría, sirven al Señor, que es santo, y
Al
principio, la sabiduría lo llevará por caminos sin rumbo y lo
SALMO
RESPONSORIAL del salmo 118
R/. Quienes aman tus
leyes, de inmensa paz disfrutan.
Quienes
aman tus leyes, de inmensa paz disfrutan; para ellos
Brotarán
de mis labios, Señor, tus alabanzas, pues tu ley me
De
ti, Señor, con ansias deseo mi salvación; tu ley es mi deleite.
ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO Jn 14, 6
R/. Aleluya, aleluya.
Yo
soy el camino, la verdad y la vida; nadie va al Padre, si no
EVANGELIO
[El
que no está contra nosotros, está a nuestro favor]
Del
santo Evangelio según san Marcos 9, 38-40
En
aquel tiempo, Juan le dijo a Jesús: "Hemos visto a uno
REFLEXIÓN: En nombre de sus compañeros el
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Dios
nuestro, cuya providencia dirige cada momento de nuestra
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN
Col 1, 24
Completo
en mi carne lo que falta a la pasión de Cristo, por el
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Dios
nuestro, auxilio inefable en la enfermedad, ayuda con
Verde / Blanco Feria o
SAN GREGORIO DE NAREK, ABAD Y DOCTOR DE LA IGLESIA,
MR p. 910 [949] / Lecc. I p. 648
San
Gregorio se supone nacido en el Vaspurakan,
en Armenia, hacia el 944 y fallecido en el monasterio de Narek,
sobre el lago Van (Turquía), en 1010. Célebre por sus altos logros
culturales. Fue un clérigo, teólogo, poeta y filósofo, ilustre por
su doctrina, sus escritos y su sabiduría mística. El 12 de abril de
2015 el papa Francisco lo reconoció oficialmente Doctor de la Iglesia
al conmemorar los 100 años del genocidio armenio. El 11 de febrero
de 2021 el mismo Sumo Pontífice confirmó su festividad el 27 de febrero,
introduciendo su celebración en el calendario universal.
ANTÍFONA DE ENTRADA Dn 12, 3
Los
guías sabios brillarán como el esplendor del firmamento, y los que
enseñaron a muchos la justicia, resplandecerán como estrellas por
toda la eternidad.
ORACIÓN COLECTA
Señor
Dios, que te dignaste colmar de celestial doctrina a san Gregorio
de Narek, concédenos, por su intercesión, custodiar fielmente
esa misma doctrina y profesarla en nuestra vida. Por nuestro Señor
Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu
Santo y es Dios por los siglos de los siglos.
PRIMERA LECTURA
[No tardes en volverte
al Señor. ]
Del libro del Sirácide
(Eclesiástico) 5, 1-10
No
confíes en tus riquezas ni digas: "Con ellas todo lo tengo". No te
dejes arrastrar por tus instintos y pasiones, ni sigas tus antojos
y caprichos.
No
digas: "Yo a nadie me someto", porque el Señor te pedirá cuentas.
No digas: "He pecado y nada me ha sucedido", porque el Señor es paciente
para castigar
No
confíes en el perdón de Dios para amontonar pecado tras pecado, diciendo:
"Su misericordia es grande y él perdonará todas mis culpas", porque
en él hay misericordia, pero también hay cólera, y descarga su ira
sobre los malvados.
No
tardes en volverte al Señor, ni lo dejes de un día para otro, porque
su furor estalla de repente y perecerás en el día del castigo. No
confíes en el engañoso dinero, que de nada te servirá en el día de
juicio. Palabra de Dios.
SALMO RESPONSORIAL del salmo 1
R/. Dichoso el hombre que confía en el Señor.
Dichoso
aquel que no se guía por mundanos criterios, que no anda en malos
pasos ni se burla del bueno, que ama la ley de Dios y se goza en cumplir
sus mandamientos. R/.
Es
como un árbol plantado junto al río, que da fruto a su tiempo y nunca
se marchita. En todo tendrá éxito. R/.
En
cambio los malvados serán como la paja barrida
por el viento. Porque el Señor protege el camino del justo y al malo
sus caminos acaban por perderlo. R/.
ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO Cfr. 1 Tes 2, 13
R/. Aleluya, aleluya.
Reciban
la palabra de Dios, no como palabra humana, sino como palabra divina,
tal como es en realidad. R/. Aleluya.
EVANGELIO
[Más te vale entrar manco en la vida, que ir con las dos manos
al lugar de castigo.]
Del santo Evangelio según san Marcos
9, 41-50
En
aquel tiempo, Jesús dijo a sus discípulos: "Todo aquel que les dé
a beber un vaso de agua por el hecho de que son de Cristo, les aseguro
que no se quedará sin recompensa. Al que sea ocasión de pecado para
esta gente sencilla que cree en mí, más le valdría que le pusieran
al cuello una de esas enormes piedras de molino y lo arrojaran al
maR/.
Si tu mano te es ocasión de pecado, córtatela;
pues más te vale entrar manco en la vida eterna, que ir con tus dos
manos al lugar de castigo, al fuego que no se apaga. Y si tu pie te
es ocasión de pecado, córtatelo; pues más te vale entrar cojo en la
vida eterna, que con tus dos pies ser arrojado al lugar de castigo.
Y si tu ojo te es ocasión de pecado, sácatelo; pues más te vale entrar
tuerto en el Reino de Dios, que ser arrojado con tus dos ojos al lugar
de castigo, donde el gusano no muere y el fuego no se apaga.
Todos
serán salados con fuego. La sal es cosa buena; pero si pierde su sabor,
¿con qué se lo volverán a dar? Tengan sal en ustedes y tengan paz
los unos con los otros". Palabra
del Señor.
REFLEXIÓN: Para entrar en el Reino de Dios hay que esforzarse por
tener las disposiciones de un «niño», es decir: humildad y sencillez.
Hay que fomentar además la caridad, atender a los más débiles, evitando
los escándalos. Finalmente, hay que «cercenar» todo lo que puede malograr
nuestra fidelidad a Cristo y a su Evangelio. La persecución puede
ser un elemento purificador, como la «sal» y el «fuego. La vida cristiana
-cuando se desarrolla de acuerdo a las exigencias de un amor servicial
y fraterno- se convierte así en un sacrificio agradable a los ojos
del Señor (Cfr. Rom 12, l-2).
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Al
celebrar estos divinos misterios, te suplicamos, Señor, que el Espíritu
Santo derrame sobre nosotros la luz de la fe que iluminó a san Gregorio
de Narek para propagar tu gloria sin descanso. Por Jesucristo,
nuestro Señor.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN
Cfr. 1 Cor 1, 23-24
Nosotros
predicamos a Cristo crucificado: a Cristo, fuerza de Dios y sabiduría
de Dios.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Fortalecidos,
Señor, con el alimento celestial, te suplicamos humildemente que,
siguiendo las enseñanzas de san Gregorio de Narek,
perseveremos siempre en acción de gracias por los dones recibidos.
Por Jesucristo, nuestro Señor.
Verde / Blanco Feria o
Misa del Sagrado Corazón de Jesús
MR p. 1122 [1168] / Lecc. I p. 652
ANTÍFONA DE ENTRADA Sal 32, 11.19
Los
proyectos de su corazón subsisten de generación en generación, para
librar de la muerte a sus fieles y reanimarlos en tiempo de hambre.
ORACIÓN COLECTA
Señor
Dios, haz que nos revistamos con las virtudes del corazón de tu Hijo
y nos encendamos con el amor que lo inflama, para que, configurados
a imagen suya, merezcamos ser partícipes de la redención eterna. Por
nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina contigo en la
unidad del Espíritu Santo y es Dios por los siglos de los siglos.
PRIMERA LECTURA
[El amigo fiel no tiene precio.]
Del libro del Sirácide
(Eclesiástico) 6, 5-17
Las
palabras amistosas multiplican el número de amigos, los labios amables
aumentan los saludos. Es bueno que te saluden muchos; pero que uno
solo entre mil sea tu amigo íntimo. Cuando hagas una nueva amistad,
vete con tiento; no te le confíes tan fácilmente, pues hay amigos
que lo son por conveniencia y no son fieles en el día de la desgracia.
Hay amigos que se vuelven enemigos y descubren con afrenta los motivos
del pleito.
Hay
amigos que te acompañan a comer, pero nunca se aparecen en la hora
de las penas: cuando te va bien, están contigo, cuando te va mal,
huyen de ti; si te ocurre una desgracia, cambian de actitud y se esconden
de tu vista. Aléjate de tus enemigos y sé precavido con tus amigos.
El
amigo fiel es un refugio que da seguridad; el que lo encuentra, ha
encontrado un tesoro. El amigo fiel no tiene precio: ningún dinero
ajusta para comprarlo. El amigo fiel es un tónico de vida.
Los
que aman al Señor lo encontrarán; el que teme al Señor sabe ser fiel
amigo y hace a sus amigos como él. Palabra
de Dios.
SALMO RESPONSORIAL del salmo 118
R/. Señor, guíame por la senda de tu ley.
Señor,
bendito seas; enséñame tus leyes. En tus preceptos tengo mis delicias,
jamás me olvidaré de tus palabras. R/.
Ábreme
los ojos para ver las maravillas de tu voluntad. Dame nueva luz para
conocer tu ley y para meditar las maravillas de tu amor.
R/.
Enséñame
a cumplir tu voluntad y a guardarla de todo corazón. Guíame por la
senda de tu ley, que es lo que quiero. R/.
ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO Cfr. Jn 17, 17
R/. Aleluya, aleluya.
Tu
palabra, Señor, es la verdad: santifícanos en la verdad. R/. Aleluya.
EVANGELIO
[Lo que Dios unió, que no lo separe el hombre.]
Del santo Evangelio según san Marcos
10, 1-12
En
aquel tiempo, se fue Jesús al territorio de Judea y Transjordania,
y de nuevo se le fue acercando la gente; él los estuvo enseñando,
como era su costumbre. Se acercaron también unos fariseos y le preguntaron,
para ponerlo a prueba: "¿Le es lícito a un hombre divorciarse de su
esposa?"
Él
les respondió: "¿Qué les prescribió Moisés?" Ellos contestaron: "Moisés
nos permitió el divorcio mediante la entrega de un acta de divorcio
a la esposa". Jesús les dijo: "Moisés prescribió esto, debido a la
dureza del corazón de ustedes. Pero desde el principio, al crearlos,
Dios los hizo hombre y mujeR/.
Por
eso dejará el hombre a su padre y a su madre y se unirá a su esposa
y serán los dos una sola cosa. De modo que ya no son dos, sino una
sola cosa. Por eso, lo que Dios unió, que no lo separe el hombre".
Ya
en casa, los discípulos le volvieron a preguntar sobre el asunto.
Jesús les dijo: "Si uno se divorcia de su esposa y se casa con otra,
comete adulterio contra la primera. Y si ella se divorcia de su marido
y se casa con otro, comete adulterio". Palabra
del Señor.
REFLEXIÓN: Los malévolos fariseos cuestionan a Jesús acerca del
delicado tema del divorcio. Las disposiciones del Maestro sobre el
matrimonio son muy claras. Se trata de una unión indisoluble, fundada
en una mutua donación -sin artificiales condicionamientos- y que remite
al proyecto original del Creador (Cfr. Gen 2, 24). La Iglesia se mantiene firme en
la enseñanza dada por Jesús: «Esta íntima unión, como mutua entrega
de dos personas, lo mismo que el bien de los hijos, exigen plena fidelidad
conyugal y urgen su indisoluble unidad» (GS 48).
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Dios
nuestro, Padre de misericordia, que por el inmenso amor con que nos
has amado, nos diste con inefable bondad a tu Unigénito, concédenos
que, unidos íntimamente a él, te ofrezcamos una digna oblación. Por
Jesucristo, nuestro Señor.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN
Cfr. Jn 7, 37-38
Dice
el Señor: Si alguno tiene sed, que venga a mí y beba, aquel que cree
en mí. Como dice la Escritura: De sus entrañas brotarán ríos de agua
viva.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Habiendo
participado de tu sacramento de amor, imploramos, Señor, tu clemencia,
para que, configurados con Cristo en la tierra, merezcamos compartir
su gloria en el cielo. Él, que vive y reina por los siglos de los
siglos.